Esgrime ante el PSOE el 'no' del Pleno a la retirada del Anteproyecto de Ley del aborto: "Ustedes no tienen el monopolio social ni de representación de las mujeres; no nos representan ni representan a la gran mayoría".
La diputada del GPP, María del Carmen Rodríguez Maniega, proclamó hoy que su formación "no le va a seguir el juego" a quienes se oponen a los debates "en contra de la misma esencia del parlamentarismo" solicitando, "sin respetar el juego democrático", la retirada de proyectos que, como el Anteproyecto de la Ley del Aborto, aún no han entrado en las Cortes.
En su intervención con motivo del debate de una Moción de la Izquierda Plural en el Pleno sobre el aborto, la diputada popular esgrimió ante el PSOE y otros grupos de la oposición la votación de la víspera en el Congreso por la que se rechazaba la retirada de ese texto: "Ustedes no tienen el monopolio de lo social ni de la representación de las mujeres; no nos representan como tampoco representan a la mayoría de la población española".
En su discurso, Rodríguez Maniega insistió en su rechazo a la forma de hacer política de gran parte de la oposición que, en lugar de "convencer o discutir" los contenidos de las leyes, pretende "establecer premisas falsas, inexactas y alimentar el debate con demagogia y prejuicios", todo para establecer conclusiones equivocadas "porque creen que de ello obtendrán réditos electorales".
Por ello, lanzó un aviso a la oposición: "Los ciudadanos nos piden que dialoguemos, busquemos acuerdos y entendimiento y penalizarán a los que, como ustedes, están instalados en el no por el no". Máxime, apostilló, cuando tratan de liquidar "la iniciativa legislativa de un Gobierno elegido por amplia mayoría en unas elecciones democráticas".
En el caso concreto del Anteproyecto de Ley del aborto, la parlamentaria popular recordó que el PP siempre estará en la defensa de los derechos fundamentales e instó a los grupos a que en lugar de cercenar el debate aguarden a los informes encargados por el Gobierno y a que la futura norma llegue al Congreso para poder dialogar sobre "un texto cierto" que, por vez primera, "no persigue a las mujeres, sino que las despenaliza".
Para finalizar, recordó al PSOE que fue el Gobierno de Zapatero quien rompió unilateralmente el "amplio consenso social" que existía en torno a la Ley del 85 "dictando una Ley que se apartaba de la doctrina del Constitucional, sin llevarla siquiera en el programa electoral, entre el coro voces de militantes cualificados dentro de su partido -los casos de Caldera o Guerra-, y haciéndolo de tapadillo y de forma atropellada".