Así, le han trasladado sus preocupaciones por la acción del lobo en sus ganaderías, por los costes de producción y la alta fiscalidad medioambiental impuesta por el Gobierno de España. También han recordado que nadie respeta más el campo que quien vive en él.
Dentro de la campaña de proximidad que el líder del PP está realizando estos días en Galicia, y que contrasta con los viajes en Falcon de un Sánchez que sigue evitando el contacto directo con los ciudadanos, Feijóo está haciendo especial hincapié en la Galicia rural que tan bien conoce después de haber gobernado la comunidad durante 13 años.
Frente a la postura del ministro de Transportes, Óscar Puente, que ha pedido hoy la intervención policial contra la gente del campo, Feijóo reclama la acción de la política en favor de los agricultores y ganaderos españoles.
Esta reunión improvisada en Mazaricos se ha producido después de visitar Carballo—apoyando la producción local—y Muros, un municipio que simboliza la unión frente a las divisiones que impulsa el Gobierno levantando muros entre ciudadanos.