Ignacio Cosidó ha declarado que eso"no sólo socava cualquier consenso en materia de política antiterrorista, sino por un mínimo respeto a los compañeros de partido que fueron asesinados por defender la libertad de todos".
Durante la sesión de Control al Ejecutivo, Cosidó ha preguntado al ministro de Justicia, Francisco Caamaño, si considera que la colaboración para el esclarecimiento del "caso Faisán" ha sido suficiente desde el inicio de la investigación judicial.
En opinión del portavoz del PP, el caso Faisán "no es un caso menor como pretende convencernos el hoy ausente vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba". "En este momento, es uno de los principales desafíos que tiene planteado nuestro Estado de Derecho", ha asegurado.
Para el dirigente del PP "el espectáculo que ha dado hasta ahora el Ejecutivo en este caso ha sido francamente lamentable: cintas de video cortadas o manipuladas; informes policiales que aparecen o desparecen misteriosamente; acusaciones cruzadas entre los máximos responsables de la lucha contra el terrorismo".
Además, ha apuntado que "la Fiscalía General del Estado ha estado una vez más al servicio de los intereses del Gobierno que de los intereses generales del Estado". "Mentiras dichas con toda solemnidad y rotundidad en este Parlamento por el vicepresidente Primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba", ha afirmado el portavoz del PP.
Además, Cosidó ha advertido al ministro de Justicia que "por mucho que el vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior huya de este Parlamento, tenga la certeza de que va a tener que asumir las responsabilidades políticas que se derivan de este caso".
El portavoz popular ha pedido al ministro de Justicia dos cosas: "la primera que no añada la responsabilidad política, que ya tienen en este caso, la vergüenza de la mentira y de la traición a un Cuerpo Nacional de Policía que no lo merece".
"Y, en segundo lugar, que no vuelva a sugerir en sus respuestas la acusación de que lo que quiere el Partido Popular es que no se acabe con ETA" aseveró Cosidó, quién aseguró que "eso no sólo socava cualquier consenso en materia de política antiterrorista sino por un mínimo respeto a mis compañeros de partido que fueron asesinados por defender la libertad de todos, la suya y la nuestra".