Carlos Floriano ha explicado que el PSOE está sobreactuando de tal manera que los ciudadanos españoles les penalizarán en las urnas.
"Con este baremo al vicepresidente Chaves le pedirían algo así como 10 millones de años (cadena perpetua aunque la legislación no la contemple), a año por millón de subvención para la empresa donde trabaja su hija; o 700 millones de años para los responsables de los EREs de Andalucía", ha ironizado Floriano, para quien el caso más grave sería el de Rubalcaba, cuya mano está detrás del chivatazo a ETA que impidió coger con las manos en la masa a los responsables de las finanzas de ETA.
Floriano ha explicado que "no hay derecho a que se juegue con la imagen y el honor de una persona honorable como Camps por intereses espurios", ya que "ni siquiera hay ya intereses electorales detrás de esta actuación, dado que todo el mundo sabe que el batacazo socialista en Valencia va a ser de semejante dimensión que obligará al PSOE a refundarse a sí mismo en esta comunidad".
A juicio de Carlos Floriano, al igual que a nivel nacional, los dirigentes socialistas están jugando a obtener más poder interno de cara a la batalla que se producirá en las próximas fechas. "En Valencia, Alarte y sus compañeros están intentándose blindar antes del batacazo y, para ello, han logrado incluso amañar su propios procesos de primarias, tal y como se demostrará judicialmente en las próximas fechas", recuerda Floriano en relación al juicio que se celebrará el 29 de marzo por las acusaciones de pucherazo del socialista Antoni Asunción.
"Si hiciéramos un paralelismo, lo que ha hecho Alarte en Valencia es lo que están intentando hacer la facción Rubalcaba-Jáuregui a nivel nacional. Un golpe de mano para obtener el poder sin pasar por un congreso, pero no cuentan con Blanco, ni con Chacón, ni con Bono, ni con el propio presidente del Gobierno", explica Floriano, para añadir que mientras siguen en esta guerra pandillera España se está hundiendo.
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