El Gobierno de España se ha sometido esta mañana a la última sesión de control en el Congreso de los Diputados de este año, donde han vuelto a destacar preguntas relacionadas con la crisis en Cataluña y otras sobre el balance del Gobierno en estos 13 meses de mandato.
BALANCE DEL GOBIERNO
En el primer turno de intervención, ha sido la portavoz del Grupo Socialista, Margarita Robles, la que ha pedido al presidente del Gobierno hacer un balance de este año de Gobierno. Así, Mariano Rajoy ha respondido que el balance de estos meses es razonable ya que “hemos crecido por encima del 3%, muy por encima de la media europea y las grandes economías como Alemania, Reino Unido, Francia e Italia, hemos recuperado el total del PIB perdido durante la crisis, han crecido las exportaciones hasta situarse en máximos históricos, batiendo récords de turistas y también comienza la reducción de la deuda pública lo que hace que continuemos mejorando las bases de nuestra economía”.
En este punto el presidente del Gobierno ha hecho hincapié en tres grandes asuntos que considera importantes como son, en primer lugar, el empleo, donde, según los últimos datos de Seguridad Social conocidos, ha aumentado en 637.000 con respecto a un año, ha bajado en 6 puntos la tasa de paro juvenil y que gracias al apoyo del PSOE, “hemos logrado defender la unidad de España y el cumplimiento de nuestra Constitución en el asunto de Cataluña”.
De esta manera, el presidente del Gobierno ha explicado que según los últimos datos hechos públicos por el CIS, el tema que más preocupa es el paro y que ha sido con el Gobierno del Partido Popular cuando se ha reducido drásticamente. Ahora por fortuna, dice el líder de los populares, “España tiene un nivel de paro mucho menos importante que cuando llegamos al Gobierno porque fuimos capaces de reducirlo en más de dos millones y por tanto eso abala la posición del Gobierno”.
CUMPLIENDO CON LA CONSTITUCIÓN
En segundo lugar ha tenido la palabra el diputado Pablo Iglesias del Grupo Confederal Unidos Podemos-En Comú Podem- En Marea, quien ha preguntado al presidente por el cumplimiento de la Constitución en España.
A este respecto, Mariano Rajoy ha asegurado que la Constitución se cumple y se aplica en España y “la mejor muestra la hemos visto hace pocos días porque con una situación excepcional cuando se pretendían liquidar los principios constitucionales, se aplicó la Constitución en su artículo 155 para recuperar la legalidad y la plena vigencia en una parte del territorio nacional”.
Lamenta que Iglesias no haya colaborado y que haya decidido ir al Tribunal Constitucional que es quien “será el que diga si se aplica o no la Constitución”.
El responsable del ejecutivo ha ironizado con Iglesias celebrando que se haya convertido “en un entusiasta de la Constitución”, aunque considera que hay cosas que el líder de la formación morada todavía no ha comprendido bien. Así, enumera que la primera es que quien dice si la Constitución se ha cumplido o no, “no somos ni usted ni yo sino el TC porque lo dice la propia Constitución”. Explica que si cree que la Constitución no se cumple, tiene la obligación de ir al TC que le dirá si tiene o no razón. “Si usted dice que no se cumple en todos los casos a los que ha hecho referencia en su intervención, es evidente que los demás podemos pensar que usted no está cumpliendo con su obligación de ir al TC a denunciarlo”, ha sentenciado.
DIÁLOGO DENTRO DE LA LEY
En tercer y último lugar, el presidente del Gobierno, ha respondido a Carles Campuzano del Grupo Parlamentario Mixto, sobre las futuras relaciones con Cataluña.
Aquí Mariano Rajoy, ha recordado que fue en 1978 cuando se aprobó en el Congreso y luego, por el conjunto del pueblo español, la Constitución Española, “que son las reglas del juego y las normas de convivencia que nos hemos dado entre todos para poder vivir de manera civilizada y poder progresar juntos”.
En este sentido, declara que desde ese momento en España se ha dialogado y mucho dentro de la ley, incluso se han cambiado las leyes y el balance de estos cuarenta años que han sido muy positivos ya que “España vivió la mejor etapa de su moderna historia en términos de crecimiento económico y de progreso social”.
Asimismo, lamenta que todo esto dejara de ser así cuando “unos gobernantes decidieron que en su Comunidad, la Constitución no rigiera y no se aplicara; tampoco el Estatuto de Autonomía, inventando una nueva legislación, no dejaron hablar a la oposición e hicieron caso omiso de las resoluciones de los tribunales”. El presidente del Gobierno aclara que fue desde ese momento cuando dejó de aplicarse el diálogo y se puso en marcha el artículo 155 para restaurar la primacía de la ley y los derechos de las personas, así como para que “la ley no pasara a ser la del más fuerte”.
“Estoy dispuesto a dialogar, siempre lo he estado, pero el diálogo que se me ha planteado desde la Generalitat de Cataluña y del cual también he oído hablar en esta Cámara, era referéndum sí o referéndum sí y con esa suerte de planteamientos no se puede hacer nada”.
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