"No hace falta ideologizar las tecnologías o la sostenibilidad, lo que hay que hacer es trabajar para garantizar la seguridad de suministro 24 horas siete días a la semana".
El portavoz de Energía del Grupo Popular, Guillermo Mariscal, aseguró hoy que la reforma del sector energético emprendida por el Gobierno de Mariano Rajoy ha buscado siempre "garantizar la sostenibilidad económica y, por tanto, la competitividad de nuestra economía, la sostenibilidad medioambiental y la seguridad y garantía de suministro".
Así lo aseguró en el debate de totalidad del Proyecto de Ley que modifica la Ley de Hidrocarburos, una iniciativa que culmina el proceso de reforma iniciado al principio de la legislatura, "una reforma que empezó dirigiéndose a los ingresos, estableciendo un impuesto importante en la generación de impacto ambiental, a continuación se atacó la reducción de costes y en tercer lugar, se buscó potenciar y mantener el bono social para los sectores más afectados", explicó.
"Todo ello", continuó, "contando con el enorme y fantástico esfuerzo de la sociedad española, de las empresas y las familias y el coraje y extraordinario valor que este Gobierno y el Ministerio de Industria han tenido para afrontar la mayor dificultad que teníamos en materia energética: el déficit tarifario, 26.000 millones de euros acumulados, 10.000 millones cada año".
Mariscal resaltó que "en estos momentos, en nuestra factura eléctrica estamos pagando 2.000 millones en amortizaciones de la deuda y 1.000 millones en intereses, 3.000 millones que, para que podamos apreciar la dimensión del problema, es la cantidad fijada en los PGE para Educación y Cultura".
Sin embargo, el extraordinario trabajo realizado por el Gobierno ha hecho posible que, mientras que entre 2004 y 2011 la factura eléctrica de los españoles subió alrededor de un 67%, en 2013 haya bajado un 3% según el INE, y lo haya hecho un 4% en 2014. "Es evidente el cambio de tendencia que las políticas del Gobierno han generado", aseguró.
Asimismo, el portavoz popular destacó que "todas las tecnologías tienen entrada" en nuestro sistema, como prueba que más de la mitad de la energía consumida en nuestro país provenga de fuentes que no emiten CO2. "No hace falta ideologizar las tecnologías o la sostenibilidad, lo que hay que hacer es trabajar para garantizar la seguridad de suministro 24 horas siete días a la semana", manifestó.
Para Mariscal "el acceso a una energía competitiva, la utilización que de ella hagamos y la forma y las fuentes que tenga la misma supone, sin duda alguna, la mayor limitación que tiene nuestro país para mejorar los niveles de crecimiento económico".
En este sentido, subrayó que "hay que abrir los mercados, que tiene que haber señales de precios, y que la opacidad y la falta de transparencia solo benefician a los operadores mayoritarios; por tanto, no sé muy bien a quién defienden los que plantean que esto es negativo para la economía española".
Reducir la dependencia energética
Uno de los aspectos que destacó Mariscal fue la importancia de reducir la dependencia energética de nuestro país. La dependencia que tiene España del petróleo y el gas extranjero supone "37.000 millones de euros al año, mucho más de lo que pagamos por intereses de la deuda y muchísimo más de lo que pagamos en desempleo". "Si conseguimos reducir esas cifras, ese dinero podremos destinarlo a otras políticas; por ejemplo a avanzar en una mejora de la industria en nuestro país", aseveró.
Por ello, está "más que justificada la necesidad del desarrollo de esta Ley", pues la dependencia energética "afecta directamente a nuestra competitividad y los mismos que reclaman continuamente la necesidad de impulsar la industria altamente intensiva en energía en nuestro país, son los mismos que se oponen a que reduzcamos la factura energética y por tanto a que reduzcamos el precio del gas a las empresas", denunció.
Así, Mariscal mostró su satisfacción por los acuerdos alcanzados por el Gobierno Rajoy en la UE para asegurar y garantizar que la introducción de todas las interconexiones gasistas y eléctricas y los proyectos de interés común estén financiados por el Plan Juncker. "Esas interconexiones de gas y energía eléctrica supondrán para España seguridad de suministro, convergencia de precios, competitividad y por supuesto la capacidad para evacuar energías renovables en cualquier momento", subrayó.
"Creo que esta Ley supone generar y crear las bases para una nueva geopolítica energética en nuestro país, para una gobernanza sostenible y responsable de los recursos, las energías renovables, los hidrocarburos y las fuentes de energía en nuestro país", concluyó.