El Grupo Parlamentario Popular en el Congreso, acusa a la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, de incontinencia verbal y de abrir otro frente internacional al Gobierno al acusar a Grecia de mantener una política migratoria “violenta e inhumana”.
La vicesecretaria de Igualdad, Conciliación y Política Social del Partido Popular, Ana Alós, considera que el concepto de solidaridad y humanidad del Ejecutivo de Sánchez “es tan débil como la mayoría que lo engendró y que ya no lo sostiene”.
A su juicio, el Gobierno socialista ha renunciado a una política migratoria seria y responsable, siendo incapaz de parar y controlar la llegada de inmigración irregular a España. Además, añade que el Ejecutivo tiene en precario a las oficinas de extranjería y asilo lo que provoca la irregularidad sobrevenida de muchos inmigrantes que de forma regular han venido a nuestro país a trabajar.
¿Considera la ministra Morant que es solidaria y humana la política de su Gobierno que hacina a inmigrantes, mayores y menores de edad, en salas como la del aeropuerto de Bajaras, o muelles y pabellones, sin las mínimas condiciones de salubridad?, pregunta Alós, quien considera que es más humano evitar que se produzcan las salidas en origen a que la pierdan en el mar miles de inmigrantes en la ruta canaria.
Afirma que el Gobierno de Sánchez bloquea las vías regulares y ordenadas de entrada a España mientras da carta de naturaleza a las vías de inmigración irregular. “Criminaliza el control y la protección de nuestras fronteras y lanza mensajes irresponsables y temerarios que lo único que hacen es incentivar a las mafias para que sigan traficando con personas hacia España”, añade.
Tras interpelar de nuevo a Morant sobre cómo calificaría al socialdemócrata alemán Olaf Scholz por adoptar medidas contra la inmigración irregular, Ana Alós subraya que con los gobiernos socialistas la llegada de inmigración irregular a España se dispara y, en esta ocasión no iba a ser menos.
Con Sánchez, España vuelve a ser puerta de acceso irregular a Europa y lejos de abordar esta situación con un mayor y efectivo control de nuestras fronteras, con la ejecución de devoluciones y retornos, con el despliegue de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Frontex, o el establecimiento de mecanismos de control en los acuerdos con terceros países, se dedica a atacar a nuestros socios europeos y a la oposición.
El GPP concluye que la política internacional del Ejecutivo de Sánchez es un auténtico disparate cuando debe ser un asunto de Estado, pero este Gobierno no sabe lo que significa eso.
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