La portavoz de Economía del Grupo Popular, Teresa Palmer, ha destacado este jueves en el Congreso que España goza de una economía “robusta”, que crece a ritmos superiores al entorno europeo y al de la media de los países desarrollados, y que esta fortaleza de la economía española “viene avalada cada semana por algún organismo nacional o internacional que alaba nuestra evolución”.
Durante la comparecencia del ministro De Guindos en Comisión, la dirigente popular ha elogiado “la prudencia” de la que ha venido haciendo gala el Gobierno en sus previsiones económicas, que han sido determinantes a su vez en la credibilidad de las mismas -“a principios de julio el propio Ministerio elevó del 2,5% al 3% su previsión de crecimiento para 2017”, ha recordado-, y que el FMI ha apuntalado por completo al destacar en sus previsiones que la economía española “volverá a ser en 2017 y 2018 la economía desarrollada con mayor ritmo de crecimiento”.
“Este tipo de afirmaciones sobre nuestra economía empiezan a ser habituales, cada semana algún organismo destaca nuestra fortaleza y alaba nuestra evolución, felicitándonos continuamente, y debemos estar satisfechos por ello, pero sin caer en la autocomplacencia y sin olvidar de dónde venimos y cómo hemos llegado hasta aquí”, ha manifestado.
Sobre las raíces de la crisis, Palmer ha echado la vista atrás para remontarse a finales de 2011, cuando el Gobierno de Mariano Rajoy se encontró con una herencia de “practica quiebra económica y de una crisis desconocida en nuestra historia económica reciente”, si bien ha hecho hincapié en “el elemento esencial” que permitió revertir esta dinámica de crisis, salir del hoyo económico, y alcanzar el escenario actual: la política económica del Gobierno de Rajoy.
Palmer ha señalado que la política económica del actual Ejecutivo que, entre otros grandes logros ha propiciado el cambio del modelo productivo y una economía generadora de empleo, está cimentada sobre la base de tres grandes pilares: “La política de consolidación presupuestaria, la reestructuración del sistema financiero -estos dos primeros rasgos conforman, ha afirmado Palmer, “un elemento esencial para entender el crecimiento diferencial español”-, y las reformas estructurales adoptadas”.
Estos tres elementos, ha continuado explicando la portavoz popular, “son la clave y los cimientos de la recuperación y de la actual coyuntura económica española”, de ahí su insistencia, así como la del Gobierno, por continuar la línea iniciada que “tan buenos resultados está ofreciendo”, corrigiendo desequilibrios y mejorando la competitividad, y, en virtud de la cual, “hemos cambiado el modelo de crecimiento, que hoy es equilibrado y está sostenido en la demanda interna, pero también en la aportación positiva del sector exterior”.
Y es que, como ha detallado la portavoz popular, “las exportaciones netas están creciendo en un entorno de dinamismo de la demanda interna, y eso es un hecho novedoso y un dato histórico, que representa un cambio estructural de enorme relevancia”. “Y ese patrón de crecimiento económico está siendo generador intenso de empleo”, ha indicado, contraponiendo la actual dinámica del mercado laboral a la última fase de los gobiernos socialistas de Rodríguez Zapatero, que generaron más de tres millones y medio de desempleados.
Finalmente, Palmer ha puesto el foco en un campo de potencial mejora del crecimiento económico español detectado, a su vez, en el “exhaustivo trabajo” llevado a cabo por el Ministerio de Economía: el tamaño medio empresarial. Y es que en España existen más de tres millones de empresas, de las cuales más del 90% tienen menos de 10 empleados y más del 80% no llegan a tres, lo que habla de “un tejido empresarial atomizado, que es una de las claves que indica el menor nivel de productividad español respecto a otros países”.
Por ello, “aumentar el tamaño empresarial medio haría que las empresas mejoren su capacidad competitiva y tendría enormes repercusiones positivas con consecuencias evidentes sobre el crecimiento potencial de nuestra economía”, y en este objetivo Palmer ha querido destacar “la disposición” del Ministerio para actuar en los tres tipos de trabas que obstaculizan dicha meta: las relacionadas con el marco regulatorio, las vinculadas al clima de negocios y las que están determinadas por la no existencia de una unidad de mercado.
“Finaliza un curso político que ha sido muy positivo en términos económicos”, ha concluido sobre “el innegable cambio producido en nuestra economía”, y que vienen a corroborar “los históricos datos” conocidos este mismo jueves de la EPA. “Ya pocos pueden discutir que nuestra economía se erige en locomotora de los países avanzados, utilizando palabras del FMI”, ha asegurado Palmer, quien ha apelado a continuar trabajando en esta senda desde el diálogo.