Alicia García recuerda todos los imputados cercanos a Sánchez y concluye: “Esto no son bulos, esto es corrupción por aplastamiento”

La portavoz del PP en el Senado, Alicia García, lanza las siguientes preguntas a todo el hemiciclo sobre la corrupción que acorrala a Sánchez: o ¿Está la mujer del presidente imputada? o ¿Está el hermano del presidente imputado? o ¿Está su todopoderoso exnúmero 2 imputado? o ¿Está el Fiscal General imputado? o ¿Pueden estar imputados los ministros cercanos a la filtración con cianuro? o ¿Hay seis altos cargos del Ministerio de Fomento imputados? o ¿Y están más de 10 ministerios implicados en problemas judiciales? 

“Esto no son bulos, esto es corrupción por aplastamiento”, asevera García, quien subraya que “no hay sanchista sin trama ni trama sin Sánchez”. 

Denuncia que “Sánchez ha convertido La Moncloa y Ferraz en centros de negocios particulares”. 

Asegura que “esto no se arregla con un fin de semana aplaudiendo y glorificando al sanchismo, ni abrazando la corrupción ni enalteciendo el mayor fraude de corrupción de su partido”. 

“Esta depravación de la democracia solo se arregla dando la palabra a los españoles para que puedan dormir tranquilos”, afirma. 

Advierte al Gobierno de que “no podrán someter a la Justicia, al Parlamento, a las instituciones del Estado, a los medios de comunicación y a los españoles” 

“España es más fuerte que el sanchismo y que el nepotismo de su jefe, y pondrá freno a sus tropelías y corruptelas”, asevera. 

“España no merece un Gobierno más pendiente de su defensa judicial que de los problemas de los españoles”, remarca la dirigente del PP, quien señala que “España no merece un Gobierno que empezó al dictado de un prófugo y hoy está al dictado de las citaciones judiciales”.

Indica que el de Sánchez “era el Gobierno de la ambición: todo por La Moncloa”, y resalta que “han pasado de ser el Gobierno de la ambición a ser el Gobierno del miedo a la justicia por la corrupción”. 

Le pide al ministro Bolaños que se imagine un país con un Gobierno, un Partido, a la mujer y al hermano del presidente salpicados por la corrupción; un Gobierno que utiliza al Fiscal General en una cacería ilegal contra una presidenta autonómica; y un Gobierno con su exministro de Fomento imputado y ya citado en el Supremo. 

“¿Qué tendría que hacer ese Gobierno?”, se pregunta García, quien considera que “por decencia y por democracia tendría que dimitir”.