Juan Antonio Abad: "Es una ley de armonización, que aplica principios de buena regulación y el principio de eficacia nacional, basado en la confianza mutua y la cooperación entre las distintas Administraciones".
La diputada del Grupo Popular Belén Juste, aseguró hoy que la Ley de garantía de unidad de mercado es "una reforma vital, aperturista y modernizadora, fundamental para la recuperación económica del país, que va a corregir defectos estructurales de la economía española".
Durante el debate en la Comisión de Economía y Competitividad del dictamen de la ponencia de este Proyecto de Ley, la diputada popular afirmó que debemos buscar "un nuevo modelo de crecimiento basado en mercados sin barreras de entrada, con capacidad de entrar y salir, de precios reducidos y por supuesto, que favorezca al consumidor". "Es una reforma que ya no podíamos seguir ignorando si queremos que España sea un país moderno, y demuestra, una vez más, que el Gobierno de Mariano Rajoy no abdica de la responsabilidad de gobernar", añadió.
En este sentido, Juste se preguntó por qué los grupos de la oposición "se oponen a una norma que elimina las barreras al entendimiento y a la actividad económica, una norma similar a la que muchos de ustedes dieron su aprobación hace cuatro años: la Directiva Europea de Servicios, que comparte exactamente los mismos principios de no discriminación, cooperación y confianza mutua, eficacia de las actuaciones de las autoridades en todo el territorio nacional, necesidad y proporcionalidad, transparencia y simplificación".
"La verdad es que no entendemos cuál es el problema", continuó. "Se trata de una legislación inspirada en el principio de licencia única y de fijación de origen, que están dirigidos a asegurar la libre circulación de bienes y servicios por todo el territorio nacional", aseveró Juste.
Para la diputada popular, "esta normativa también permitirá a los productores pedir una única licencia en una comunidad autónoma y comercializar con ella sus productos en todo el país". "Los prestadores de servicios tendrán también que pedir una única habilitación de actividad y que atender, al igual que ocurre en Europa", con lo que, en la práctica, se elimina "el coste de tener que someterse hasta a 17 regulaciones distintas para operar en España", una "maraña legislativa" que, según la CEOE, "cuesta alrededor de 45.000 millones de euros a la economía española cada año ¿Creen que nos lo podemos permitir?", preguntó.
Asimismo, negó que la Ley de unidad de mercado invada competencias autonómicas. "Si hay una norma que no tiene nada de recentralizadora es ésta; esta Ley da absoluto realce a la capacidad normativa de las CCAA y dota de eficacia en todo el territorio nacional a las autorizaciones concedidas por los legisladores autonómicos", explicó.
También aseguró la diputada del PP que no hay visos de inconstitucionalidad en la norma, tal y como ha dicho el Consejo de Estado, que ha dictaminado que la Ley de unidad de mercado "no afecta como tal a competencias autonómicas y locales, sino que promueve la eficacia reguladora corrigiendo obstáculos a la libertad de establecimiento y circulación de bienes".
Juan Antonio Abad: "Es una ley de arminización"
También intervino el diputado del Grupo Popular Juan Antonio Abad, que afirmó que la Ley de unidad de mercado es "una ley de armonización, que aplica principios de buena regulación y el principio de eficacia nacional, basado en la confianza mutua y la cooperación entre las distintas Administraciones".
En su opinión, "nuestras empresas están demostrando que somos competitivos y que somos capaces de ganar cuotas de mercado a través de ellas, incluso cuando las circunstancias son especialmente desfavorables" y que "las administraciones tenemos la obligación de resolver todas las dificultades que las empresas se puedan encontrar en su camino hacia la expansión", por lo que pidió a los grupos parlamentarios su apoyo a la Ley de unidad de mercado.