El portavoz de Energía del Grupo Parlamentario Popular, Antonio Erías, señaló hoy que el "objetivo prioritario es acabar con el déficit anual de tarifa y evitar que vuelva a aparecer" a través del camino de la "ortodoxia regulatoria".
Así, durante el debate del Proyecto de Ley de medidas fiscales para la sostenibilidad energética en el Pleno del Congreso, el portavoz popular afirmó que "el déficit tarifario constituye una barrera para el adecuado desarrollo del sector energético".
Según explicó el diputado del PP, el déficit surge porque "las tarifas que pagan los consumidores son demasiado bajas o los ingresos que perciben las empresas son demasiado altos o una combinación de ambas" lo que se transforma en "una deuda contraída con las empresas que hay que pagar inexcusablemente".
Para acabar con ello, el dirigente popular subrayó que lo primero era "parar la burbuja que lo generaba, con la moratoria renovable, y ahora se trata de evitar que se siga dando en el futuro ya que la deuda acumulada se ha colocado en los mercados e incorporado a las tarifas".
De no hacerlo, argumentó, "las consecuencias directas, serían un incremento de los pagos a través de los peajes y un aumento del endeudamiento de las empresas eléctricas que están obligadas a financiar temporalmente el déficit del citado sistema".
En opinión de Erías, "si continuaran con la política irresponsable del anterior Gobierno, las medidas que habría que adoptar hubieran recaído íntegramente sobre el consumidor, cuyo recibo se vería incrementado en un 100 por cien".
Además recordó que "si no se ataja el déficit de tarifa, que en diciembre de 2011 alcanzaba los 24.000 millones de euros, éste aumentaría a un ritmo de 6.000 o 7.000 millones de euros anuales".
Nuevas figuras impositivas
Asimismo, remarcó que "la estrategia del Gobierno se basa en la reducción del gasto y el aumento de los ingresos sin quebrar los principios de justicia y equidad, minimizando la repercusión de los nuevos impuestos en el precio del mercado".
Unas medidas que, como recordó, ya venía reclamando la Comisión Nacional de la Energía y la Comisión Europea en su documento "Evaluación del programa nacional de reforma y del programa de estabilidad de ESPAÑA para 2012".
Respecto al aumento de ingresos, incidió en las nuevas figuras impositivas a la energía nuclear, el canon a la energía hidráulica, el gravamen a la producción de energía para todas las tecnologías y el céntimo verde para el gas, el carbón y el fuel oil.
En relación al céntimo verde, aseguró que se trata de un "elemento imprescindible porque además de reforzar las necesidades de consolidación fiscal se cumplen los compromisos asumidos en términos ambientales".
Todo ello, dijo, "contribuye a armonizar el sistema fiscal español a través de una utilización más eficiente de los recursos energéticos intentando alcanzar la sostenibilidad del sistema eléctrico y sirve de estímulo para mejorar nuestros niveles de eficiencia energética".
Neutralidad tecnológica
Por otra parte, avanzó que "la estrategia energética española debe pivotar sobre la neutralidad tecnológica y la protección a los ciudadanos".
Sobre la energía renovable, confirmó que "el futuro del sistema energético sostenible pasa por ella", pero denunció que "la mala praxis regulatoria desarrollada en los últimos años para potenciar el despegue de estas fuentes se ha realizado a costa de un excesivo e innecesario sobrecoste para el consumidor español".