El secretario general del Grupo Popular, José Luis Ayllón, y el diputado José Ignacio Landaluce, piden que se explique las actuaciones que está llevando a cabo el Gobierno frente al "expansionismo" de Gibraltar que afecta a los intereses generales de los españoles.
En rueda de prensa en la sede del PP, el parlamentario popular por Cádiz ha denunciado -apoyándose en las imágenes mostradas a través de un vídeo durante la comparecencia-, cómo "el Gobierno no está luchando por defender los intereses de España ante ese expansionismo por tierra, mar y aire".
Landaluce ha señalado así que "uno de los mayores fracasos de la política exterior del Gobierno socialista es el litigio que nuestro país mantiene con el Reino Unido respecto a las aguas territoriales que rodean a Gibraltar".
Según Landaluce, todo ese "macroproyecto de crecimiento de Gibraltar se produce con la llegada del Gobierno de Zapatero". Y lo hace por "tierra, mar y aire".
La comparecencia de Rubalcaba, ha explicado Landaluce, perseguirá también que el vicepresidente aclare por qué razón "las embarcaciones de aduanas no traspasan los límites establecidos por el Almirantazgo inglés, por qué tampoco lo hacen los barcos de Salvamento Marítimo, por qué no los buques de la Armada y por qué la Guardia Civil tampoco supera esta línea imaginaria".
Además, de poner sobre la mesa estos "abusos", el diputado popular ha advertido del riesgo medioambiental "terrible" que supone el caso concreto de las gasolineras flotantes, que almacenan una gran cantidad de combustible. Denunció así la existencia de dos barcos con una capacidad de almacenamiento de 100.000 toneladas cada uno y, a fin de evitar un accidente medioambiental dada la gran cantidad de combustible, reclamó al Ejecutivo que inste a Gibraltar a que almacene el combustible en tierra.
En lo que respecta a las aguas, Landaluce ha señalado cómo "el Almirantazgo británico acaba de adjudicarse el 50% de las aguas de la Bahía de Algeciras". Y aparte, continuó el diputado popular, hay también otra serie de actuaciones, como la de la Marina de Gibraltar, con la que se obliga "a los barcos a marcar en los derroteros el canal que tienen que seguir cuando entran en las aguas de la Bahía de Algeciras", ocasionando con ello una "gran incertidumbre e inseguridad".