"Las mociones de censura no crean empleo"

Saludamos a los sindicatos en el esfuerzo por despertar al Gobierno y la verdad es que a los sindicatos hace tiempo que se les echaba de menos en la lucha porque el Gobierno se despierte de este placido sueño que nos está arruinando a los españoles.

De todas formas ¿no es cierto que el Gobierno les ha tomado la iniciativa política desde el debate del miércoles?

No, yo creo que el Gobierno sigue en lo mismo que ha estado desde el principio de la legislatura. El Gobierno en esta legislatura no está diciendo la verdad. Primero porque no quiso y, luego, porque ya no ha podido. Cuando tú construyes un edificio sobre un pequeño error, acaba siendo un rascacielos del error. El Gobierno, en este momento, no es que ya no quiera, es que esta en una situación en la que no puede decir la verdad y huye hacia delante.

Pero, ¿por qué no pueden ustedes recoger la mano tendida del Gobierno? o ¿no se la creen?

Cuando uno te dice "esto podemos arreglar entre todos", si es que ha sido el que ha causado el estropicio pues, lo normal, es que antes de que lo arreglemos entre todos que se vaya el que lo ha estropeado. La verdad es que nosotros podemos sentarnos a hablar con el Gobierno pero a hablar en serio. Si el Gobierno quisiera un pacto en serio con el PP, Zapatero habría llamado a Rajoy, cosa que no ha hecho. Habrían tenido una reunión discreta con el PP, cosa que no se ha hecho. Se habría informado de que se iba a proponer el pacto o se nos habría informado de los contenidos del pacto, cosa que no se ha hecho y el resultado es que se nos invita al PP a una reunión con todos los partidos políticos en la que el Gobierno va a proponer un texto en el que, en principio, podemos estar de acuerdo, a la vez, Izquierda Unida, Esquerra Republicana de Cataluña y el Partido Popular.

Pues, presenten ustedes una moción de censura.

Las mociones de censura no crean empleo. Lo que tendría que hacer el presidente del Gobierno es convocar elecciones si no puede resolver la presente crisis económica. Esta legislatura es, en algún sentido, una legislatura fallida porque durante la campaña electoral no se hablo de la crisis porque el presidente del Gobierno no la reconoció. Cuando empezó la legislatura se negó la crisis porque el presidente del Gobierno no podía explicar cómo había sido elegido con una campaña electoral en la que había negado la existencia de la crisis. Y hemos llegado hasta la mitad de la legislatura sin crisis y, cuando la crisis presenta su peor cara tenemos que reunirnos todos para resolverla. Debería haber una campaña electoral en la que los ciudadanos opinasen sobre la crisis y los partidos políticos ofrecieran sus soluciones. Y un Gobierno recién salido de las urnas, con la fuerza que eso le da, ya puede hacer las coaliciones que quiera o que no quiera y afrontar las reformas que España necesita.

A parte del pacto, el otro tema son las pensiones. El debate, como ustedes suelen decir, está en la calle ¿Hay que subir la base de cálculo de las cotizaciones?

Para el PP el problema de las pensiones no vendrá dentro de veinte años, ni dentro de veinticinco, viene el año que viene. En este momento hay, aproximadamente, un millón setecientas mil personas cobrando la prestación por desempleo que van a dejar de cobrar la prestación por desempleo durante este año y, por lo tanto, van a dejar de cotizar. La Seguridad Social ha perdido dos millones de cotizantes desde que empezó la crisis y al terminar este año podría haber perdido cuatro millones de cotizantes. Plantearnos que ocurrirá dentro de 20 o 25 años es lanzar el problema hacia adelante y no afrontar el verdadero problema. En España, no sobran pensionistas, faltan trabajadores y lo que tenemos que hacer es, de verdad, crear puestos de trabajo y no plantearnos debates que vendrán dentro de muchos años si no creamos puestos de trabajo. En el fondo, hoy debatir sobre ampliar la edad de jubilación o reducir los años base para cobrar la prestación es admitir que los próximos 25 años seguiremos con un 20% de desempleo y nosotros no nos resignamos a eso.

¿El Caso Gürtel le sigue preocupando, señor González Pons?

Pues, lo cierto, es que aparentemente el Caso Gürtel ha dado ya todo lo que tenía que dar de sí. Se presento como el gran caso de financiación ilegal del PP y ha terminado siendo el caso de financiación de algunas personas a costa del PP. Ahora bien, nosotros estamos reclamando a voces que se levante ya el secreto de sumario porque ese secreto de sumario descompensa el sistema de equilibrio posicion Gobierno en España perjudicando, seriamente, el titulo democrático de nuestro Estado de Derecho. Piense que hay un sumario secreto, que tiene miles y miles y miles de folios, que afecta al primer partido de la oposición, que el primer partido de la oposición no lo conoce y que el Gobierno si lo conoce porque el ministro de Justicia tiene sometido, jerárquicamente por Ley, a la Fiscalía, que conoce el sumario, y el ministro del Interior tiene sometida jerárquicamente por Ley a la policía, que conoce el sumario. Y de ese sumario se van produciendo, sistemáticamente, filtraciones de las partes que pueden perjudicar al partido de la oposición, cuando le perjudica al partido de la oposición, y sin ningún matiz que beneficie al partido de la oposición. Es decir, el Gobierno conoce el sumario, afecta a la oposición, la oposición no lo conoce y alguien con intención política filtra ese sumario para ir perjudicando a la oposición.

El juez Garzón, precisamente, esta también implicado en otro asunto que ustedes han llevado muy duramente al Parlamento, el caso Faisán ¿Qué consecuencias políticas esperan que salgan de este asunto?

Esperamos que se diga la verdad. Nada más que eso que Gobierno diga la verdad y que sepamos todos si se produjo una traición a la policía desde las instancias políticas del ministerio del Interior o no. No estamos pidiendo nada extraordinario. Si hubiera ocurrido en cualquier otro país europeo, en este momento y a estas hora, la tensión producida por el escándalo habría hecho ya, o que el Gobierno diga la verdad o, por no decir la verdad, el Gobierno debería asumir responsabilidad política. Pues, eso es lo que pedimos, normalidad europea en términos democráticos. Que el Gobierno diga la verdad o por no decir la verdad, asuma responsabilidades políticas porque, si en un caso como El Faisán, el Gobierno no es capaz de decir la verdad, alguna razón hay para que el Gobierno calle cuando debería no mentir.

El mismo periódico que destapo el asunto Faisán, el diario El Mundo, esta semana está recuperando imágenes, sonidos, testimonios, de los análisis de los explosivos del 11M, vuelve a la carga con la cuestión, y ayer planteaba en un editorial la necesidad de revisar la sentencia sobre este asunto ¿qué piensa el PP sobre el particular?

Voy a decir dos cosas, la primera, hay un sumario abierto y, por lo tanto, los tribunales están trabajando así que deseemos, entre todos, que ese sumario llegue hasta las últimas consecuencias y agote, judicialmente, este asunto porque es un asunto importante. Y, en segundo lugar, los españoles tienen derecho a saber la verdad. Frente a la historia, esta época de la democracia española no puede ocultar la verdad.

Y ¿Pizarro va a seguir en el PP?

Bueno, supongo que sí. Manuel Pizarro es un extraordinario político, hombre...bueno, Manuel Pizarro es un humanista. La verdad, yo he tenido la posibilidad de conocerle, al principio de la legislatura me toco escaño con escaño junto a él, y Manuel Pizarro está en la España del Siglo XXI pero debería haber estado en la Florencia del Siglo XV. Es un hombre, no solo que sabe de todo, sino que todo lo que hace lo trata con tal humanidad que lo hace accesible al resto de personas que están con él.