Álvarez de Toledo: “El primer órgano de desinformación en España es hoy el Gobierno”

La portavoz adjunta del GPP Cayetana Álvarez de Toledo denuncia que “el Ejecutivo no solo ha banalizado la mentira hasta convertirla en un simple cambio de opinión, también ha hecho de los bulos su estrategia de supervivencia” 

Llama a “frenar y revertir la degradación” que entraña tener un Gobierno de la nación que “desprecia la verdad, practica con saña el atajo populista del divide y vencerás, socava el suelo de valores democráticos, sabotea los consensos y destruye la conversación pública de quienes piensan diferente” 

Advierte de que “la prensa libre está sometida hoy a una presión desquiciada, pero especialmente desde el pasado 29 de abril cuando Sánchez, tras cinco días de baja por victimismo, anunció su intención de acabar con cualquiera que ose investigarlos a él, a su mujer o a su Gobierno” 

Explica que “fruto de aquel arrebato antidemocrático de Sánchez nació el Plan de Acción Democrática de Bolaños, una apoteosis orwelliana” 

Por ello, propone “defender, amparar y reforzar la libertad informativa, expresión del pluralismo, contrapeso esencial del Poder Ejecutivo y condición necesaria de una democracia plena” 

Subraya que “el Reglamento Europeo busca proteger a los medios del Gobierno y el Plan Begoña pretende proteger al Gobierno de los medios. Y todo lo que invoca, es lo que el Gobierno conculca: transparencia - “cuenten qué hace Cerdán en Suiza o empiecen por contestar las preguntas en sesión de control y en ruedas de prensa”, exige-; o refuerzo del derecho al honor -mientras calumnia a jueces y llama fascistas a periodistas- 

“De la imprescindible independencia de los medios públicos el Plan del Gobierno no dice nada – repone-, a diferencia del Reglamento Europeo y, por si quedaba alguna ínfima duda, ayer lo dejaron claro: un decretazo para reducir las mayorías, orillar al Senado y asaltar el Consejo de RTVE”

Recalca que el PP no permitirá al Ejecutivo que convierta la RTVE “en un pseudo-medio y a España en una democracia fallida”, como pretende el ministro López “invocando el pluralismo para destruir el pluralismo, y la independencia de los medios públicos para rematar su sumisión”