La portavoz del GPP, Cuca Gamarra, asegura que “en cualquier país democrático” ya se hubieran producido las dimisiones del Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz, y de su antecesora y ex ministra, Dolores Delgado, tras conocer la resolución del Tribunal Supremo, anulando el ascenso de Delgado a fiscal de Sala por desviación de poder. “Esperamos que así suceda en España”, asevera
Celebra que la Justicia funcione a pesar del control que quiere ejercer Sánchez sobre ella, recuerda las palabras del presidente del Gobierno preguntando de quién depende la Fiscalía y le espeta que esta también está fiscalizada por el Poder Judicial porque “está sometida al imperio de la Ley”
Denuncia que “la legislatura se desliza constantemente en la anomalía democrática”, y pone como ejemplo que el Senado funcione y tenga control al Gobierno pero el Congreso esté cerrado
Afirma que “es una anomalía democrática que el control al Gobierno no se lleve a cabo por la oposición, sino que se realice en Suiza” por un prófugo de la Justicia
“A Sánchez le molesta el Parlamento, como cualquier institución, órgano o persona que no se doblegue a sus deseos y voluntad”, asevera Gamarra, quien apunta que “por ello quiere minimizar la actividad política del Congreso”
Señala que la actividad de la Cámara Baja hoy se ha circunscrito solo a la calificación de la ley de amnistía y dos comisiones de investigación ‘lawfare’
También se visibiliza la anomalía democrática en que la actividad legislativa del Congreso quede reducida a cumplir las exigencias y condiciones que Puigdemont, ERC, PNV y Bildu han impuesto a Sánchez para seguir siendo presidente del Gobierno. “Un Gobierno que para continuar depende de esta ley”, remarca
Anuncia que el GPP va a registrar la reconsideración de la admisión a trámite de la ley de amnistía porque su tramitación “esta viciada, ya que solo se lleva a cabo con un objetivo, que no es el de la convivencia sino el de la conveniencia”
Explica que el GPP se ha opuesto a la tramitación de la ley por las mismas razones, compartidas con el PSOE, que en 2021. “Lo que era inconstitucional entonces lo sigue siendo ahora si no se ha cambiado la Constitución”, subraya Gamarra, al tiempo que asegura que “el PSOE seguiría en esa misma posición si no fuera porque es la condición impuesta por Puigdemont a Sánchez para seguir siendo presidente"
Lamenta que para el PSOE “la impunidad esté por encima de la constitucionalidad, para el PP no”
Subraya que el escrito de recusación del PP contra quien hoy es secretario general del Congreso se fundamenta en que formaba parte del Gobierno hasta el día antes de su nombramiento. “Quien viene del Gobierno no puede ser quien califique una iniciativa que es la condición impuesta por Puigdemont a ese Gobierno para mantenerse en el poder”, apostilla
Advierte de que las comisiones de investigación que el PSOE ha permitido echar a andar cuestionan el Estado de derecho y la separación de poderes: “Quieren controlar la actividad judicial que se ha llevado a cabo en nuestro país”
Denuncia que la constitución de estas comisiones lleva “implícito” que en España no hay una democracia plena y que hay “una guerra sucia” para perseguir a los políticos con ideas independentistas. “Es inaceptable”, asevera
“Deberíamos tener un presidente del Gobierno al servicio del Estado, pero Sánchez está poniendo el Estado al servicio del presidente del Gobierno”, denuncia Gamarra, quien remarca que nunca en cuatro décadas una misma persona -en referencia al ministro Bolaños- ha ostentado las relaciones del Gobierno con el Parlamento y el Poder Judicial, “todo un símbolo del control de poder que pretende Sánchez”
Afirma que el PP hará una oposición “firme y rigurosa”, desde el ámbito jurídico, político, social y civil, contra la colonización de las instituciones por parte de Sánchez