Tellado al PSOE: “Nadie les ha votado para que hagan lo que dijeron que no harían”

• El vicesecretario de Organización denuncia que Sánchez y los suyos traicionarán no sólo a la democracia española, sino a sus votantes, si acceden al chantaje de Puigdemont, porque durante toda la campaña electoral dijeron por activa y pasiva que no habría amnistía

• Señala que el PP está trabajando para tener el partido preparado ante cualquier escenario posible: ser Gobierno en 15 días, oposición si Sánchez “finalmente no tiene escrúpulos y acepta las condiciones de Puigdemont” o una repetición electoral el próximo mes de enero

• Justifica la convocatoria del PP de un gran acto de protesta contra una amnistía que no tiene cabida en la Constitución, porque los ciudadanos tienen motivos para creer que Sánchez y los socialistas “una vez más intentan engañarles”, cuando afirman que este asunto no está sobre la mesa

• “Salir a la calle para expresarse en contra de lo que todo el mundo cree que Sánchez va a hacer vulnerando el marco Constitucional es legítimo y legal”. “Hay un clamor social contra lo que pide Puigdemont y ningún gobierno democrático debería cuestionar que se refleje en la calle”

• Pide a Sánchez que escuche a líderes históricos de su propio partido, “que le están diciendo que no puede transitar el camino que pretende” y no sólo al PP o a la mayoría ciudadana que dice que las condiciones de Puigdemont son inaceptables

• Sánchez no puede traspasar las líneas rojas que marca la Constitución, ningún socialista le perdonaría pasar esa puerta para conseguir ser presidente del Gobierno durante unos meses más”, afirma

• Cree que las lenguas cooficiales son una riqueza, pero en el Congreso defiende el uso de la lengua común, el castellano, “porque las lenguas son para entendernos y no son diques de contención ni banderas de reivindicación”

• Pone en valor el “inmenso” trabajo de Daniel Sirera que ha realizado durante la campaña y tras las elecciones, doblando el número de concejales en el Ayuntamiento de Barcelona, incrementando el voto al PP en un 60% y desalojando a Ada Colau del gobierno de la ciudad