Destaca que la normativa de incompatibilidades del Congreso es de las más estrictos de Europa y ensalza el valor añadido que supone para el legislador contar con diversas perspectivas vitales y profesionales.
El diputado del Grupo Parlamentario Popular, Leopoldo Barreda, ha afirmado hoy que "no es legítimo cuestionar la veracidad y la honorabilidad del Parlamento sólo porque el PSOE no sea capaz de aclararse".
En su intervención durante el debate del dictamen de la Comisión del Estatuto de los Diputados sobre la declaración de actividades de los diputados en el Pleno del Congreso, Leopoldo Barreda ha indicado que este escrito, que cuenta con la opinión favorable de los servicios jurídicos de la Cámara, acredita que "todos los diputados cumplían las previsiones legales en sus declaraciones, que son las mismas que fueron apoyadas por unanimidad en la XI legislatura".
"Son las mismas reglas, la misma legislación, casi las mismas personas y las mismas actividades", ha subrayado Leopoldo Barreda, quien ha señalado que "lo único que ha cambiado es el PSOE, que ahora intenta aplicar su norma interna a todos los diputados; quieren sustituir la norma democrática aprobada por este Parlamento por el ordeno y mando de Pedro Sánchez". "Por eso votan hoy lo contrario que hace un año", ha lamentado el diputado popular, por lo que ha reclamado a los socialistas que lo expliquen.
Una norma que los socialistas, según ha denunciado el diputado popular, quieren establecer a su medida permitiendo la compatibilidad sólo de funcionarios, docentes, escritores o abogados que trabajen para el partido.
De esta manera, ha apuntado Leopoldo Barreda, "el Parlamento se convertiría en un coto cerrado, en un área reservada y alejada de la sociedad, un Congreso sólo para ricos, funcionarios y oportunistas de la política, sólo para quienes tengan asegurado el bienestar, reserva de plaza en la Administración o prueben en política como se prueba unos zapatos y con la misma responsabilidad".
Para ello, ha indicado el diputado del PP, "los socialistas han extendido la mancha de la sospecha sobre la totalidad de la Cámara, mezclando nombres y situaciones, y estableciendo una presunción de corruptibilidad que alcanza a todos los presentes y a todos los que nos precedieron".
Es esencial regular las relaciones entre los grupos de interés y los parlamentarios