El portavoz adjunto del GPP, Rubén Moreno, ha querido recalcar este martes en Comisión que el presupuesto de la Casa del Rey “no es el sueldo del Rey”, y que dicha asignación anual “no ha sido ajena al tiempo de crisis”.
En su intervención con motivo del debate de parcialidad de los PGE, el parlamentario popular ha recalcado que el presupuesto de la Sección correspondiente contempla “los salarios, las retribuciones, los gastos, las prestaciones sociales de todo el personal, incluyendo altos cargos, funcionarios y personal laboral, además de los gastos corrientes y no solo de protocolo, tal y como corresponde a cualquier institución del Estado”.
Según ha reiterado, el presupuesto para la Casa del Rey “es una obligación no solo constitucional, sino que además de dar cumplimiento al artículo 65 de la Constitución, su finalidad es que el jefe del Estado pueda ejercer con la independencia que le corresponde su labor constitucional, que ha sido impecable”.
La Casa del Rey, ha explicado Moreno, “no ha sido tampoco ajena al tiempo de crisis”, detallando que dicha asignación presupuestaria se congeló en 2010, se recortó en 2011 un 5,2%, en 2012 lo hizo un 2%, en 2013 un 4%, en 2014 un 2%, se volvió a congelar en 2015 y en 2016, y ahora experimenta un ligero incremento de un 0,5%”.
El portavoz popular ha destacado que la Casa del Rey es “la cuarta institución del Estado en transparencia”, y que es “una institución reconocida constitucionalmente, que tiene su presupuesto, que se ha visto reducido y congelado durante los últimos años, que después de siete años tiene un ligero incremento del 0,5%, y que es absolutamente transparente para realizar una labor de Estado no solo reconocida constitucionalmente, sino impecable y necesaria para nuestro país”, ha repetido.
Finalmente, Moreno se ha referido a las más de 47.000 enmiendas presentadas por la suma de la izquierda parlamentaria a una partida que cuenta con 15 millones de presupuesto, casi tanto como “vender 47.000 tickets de autobús e intentar meterlos todos en un minibús para 15”.
“Y esto no puede hacerse”, ha expresado, “porque cuando uno sube (al minibús) otro tiene que bajar, y todo lo demás es un fraude a la ciudadanía”. “Vender tickets para los que no tenemos plazas es un fraude a la ciudadanía”, ha vuelto a incidir Moreno, recalcando que en ningún caso su grupo está cuestionando la idoneidad de las enmiendas de los grupos, sino intentando que estos digan “de dónde sale el dinero, porque de lo contrario faltamos al respeto a la ciudadanía, que tiene todo el derecho de saber qué se debate para mejorar su día a día”.