El pleno del Senado ha aprobado una moción impulsada por el Grupo Parlamentario Popular en la que se insta al Gobierno a adoptar las medidas necesarias para que la donación de un órgano por parte de un donante vivo se siga considerando causa de incapacidad laboral, con los efectos y las prestaciones de la Seguridad Social correspondientes.
En la iniciativa, aprobada tras incorporar una enmienda de ERC y sin ningún voto en contra, se pide que se incluya todo el proceso médico necesario que conlleve el tiempo del propio proceso de donación hasta que se produzca el trasplante.
El portavoz de Sanidad del GPP, Antonio Alarcó, ha señalado que una vez más el Senado está a la altura de las circunstancias proponiendo una moción útil y sin criterio ideológico. “Hablar de trasplante en España es la historia natural del éxito colectivo y social de este país y es un éxito reconocido por todos”.
En el 2016 España alcanzó un record histórico se trasplantes: 2.018 donantes y 4.818 órganos trasplantados. “Somos una vez más durante 25 años seguidos los número uno del mundo en donación y trasplante”.
En este sentido, el senador canario ha asegurado que incluso la organización de los trasplantes es copiada por muchos países y esto se debe “a que la Organización Nacional de Trasplantes ha conseguido un modelo copiable y exportado a todo el mundo. Durante 10 años el listado mundial de trasplantes se encuentra en España y es compartido con la Organización Mundial de la Salud”.
La actual regulación de la incapacidad temporal ya incluye como causa específica de la baja la donación de un órgano y en opinión de los expertos hay que procurar una buena preparación médica del donante, gracias a la concreción de las pruebas. Además, hay que preparar el postoperatorio de manera exhaustiva con el objetivo de aumentar la protección de quienes de manera altruista donan un órgano a otra persona.
PROTECCION PARA LOS DONANTES DE ÓRGANOS
Durante su intervención, el senador por Cuenca, Pedro Jareño, ha destacado que “el trasplante de órgano de donante vivo ha experimentado un gran aumento y es una práctica médica consolidada que salva numerosas vidas en la actualidad”.
El senador popular ha explicado que la limitación para realizar actividades laborales, con la finalidad de ser perceptor de la prestación económica de incapacidad temporal, viene dada por el reconocimiento médico y emisión del correspondiente parte de baja.
Así, ha indicado que en los supuestos de donación inter vivos, nunca se ha propugnado por parte del Instituto Nacional de la Seguridad Social una interpretación restrictiva y, “en consecuencia, nada impide que la situación del donante pueda tener, de acuerdo con la vigente normativa, la consideración de enfermedad común y determinar la situación de incapacidad temporal por dicha contingencia cuando suponga que el trabajador reciba asistencia sanitaria y esté impedido para el trabajo”.
Por último, el senador conquense ha asegurado que está justificada la necesidad de avanzar en las medidas necesarias “para ampliar la protección de personas que, de forma voluntaria y altruista, se someten a una intervención quirúrgica para, en muchos casos, salvar la vida de otra persona y en todos, mejorar su calidad de vida. Este acto de solidaridad incide positivamente no sólo en el paciente trasplantado sino también en su entorno familiar, social y laboral, en la lista de espera de trasplantes y en el gasto sanitario”.