El pleno del Senado ha aprobado una moción del Grupo Parlamentario Popular en la que se pide al Gobierno que la promoción del español y las demás lenguas españolas se convierta en una política de Estado, considerando la lengua como un bien preferente. La iniciativa ha incorporado una enmienda de Foro Asturias y se ha modificado el primer punto con el acuerdo de cuatro grupos parlamentarios.
Durante su intervención, el senador por Valladolid, Miguel Ángel Cortés, ha asegurado que “el español es el activo más valioso del que disponemos los españoles en la comunidad internacional. Un bien que no se agota con su uso, sino que su valor se incrementa con el número de usuarios”.
Cortés ha destacado que el español “es un bien público” y ha subrayado que en el mundo hay más de 550 millones de hispanohablantes. Además, ha puesto de relieve que cada curso académico 35.000 alumnos universitarios erasmus estudian en España, lo que la convierte en el principal país de destino de este programa europeo.
El senador del Grupo Popular ha pedido al Gobierno que, sin olvidar la riqueza lingüística de España, en alusión a las lenguas cooficiales, se impulsen medidas de promoción del español.
La portavoz del Cultura del Grupo Popular, Marta Torrado, ha intervenido en la defensa de la moción donde ha asegurado que “el español constituye una seña de identidad colectiva y una fuente de riqueza económica de primer orden, motivo por el cual todos somos responsables de seguir cuidándola”.
La senadora popular ha señalado que el español es “nuestro producto más internacional. Es la segunda lengua materna del mundo, tras el chino mandarín; la segunda lengua de comunicación internacional, también en la red, tras el inglés; y la segunda lengua adquirida en los países de lengua no inglesa”.
Los senadores del PP han puesto en valor el papel del Instituto Cervantes en la promoción del español y han destacado que debe continuar siendo la gran plataforma formativa internacional de la lengua.
Con esta iniciativa el Grupo Popular insta al Gobierno a que continúe trabajando en una política de proyección internacional de la lengua española; esta promoción debe concebirse como una política de Estado. El reto es que el español constituya una de las seis lenguas consideradas como oficiales en Naciones Unidas. En este sentido, Marta Torrado ha destacado que “todas las lenguas de España merecen una política de Estado”.