Era la primera vez que el escenario de esta jornada tenía como marco la “Casa de la soberanía de España”.
Representantes de las asociaciones de víctimas, autoridades entre las que se encontraban el presidente del Tribunal Constitucional, Francisco Pérez de los Cobos; el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz; el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez; la consejera de Seguridad del Gobierno vasco, Estefanía Beltrán, y el consejero del Ejecutivo catalán, Ramon Espadaler, se dieron cita en la Sala Ernest Lluch de la Cámara baja.
En el acto ha intervenido la presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, María del Mar Blanco, que ha pronunciado su discurso ante parlamentarios, representantes de las asociaciones de víctimas y miembros del Gobierno y delegaciones de las comunidades autónomas.
En su discurso, la presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Mar Blanco, quiso recordar que "España ha sufrido durante más de cinco décadas el azote del terrorismo. De manera directa o indirecta todos hemos sido víctimas porque ante el terror ningún ciudadano es inmune. La acción terrorista ha limitado las libertades de muchos, pero el mayor daño, el mayor dolor nos lo ha causado a nosotras, a las víctimas directas del terrorismo".
En la actualidad se eleva a más de mil el número de víctimas mortales de todos los grupos terroristas que han atentado en España y fuera de nuestro país contra ciudadanos españoles. Actos execrables que han acabado con demasiadas vidas y han destrozado muchas familias. Aunque a las víctimas del terrorismo nunca han logrado arrebatarles la esperanza de alcanzar una convivencia democrática en paz y en libertad.
Durante tantos años de barbarie terrorista la labor que han desempeñado los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado ha sido encomiable. Para ellos, Mar Blanco tuvo palabras de reconocimiento y cariño, recordando que "su trabajo incansable nos ha reconfortado durante tantos años de terror y su sacrificio permanente y su gran profesionalidad son un haber fundamental en la historia de la democracia de España"- subrayó.
El discurso de todas las víctimas del terrorismo ha sido, es y será el de la verdad que ellas transmiten, frente al discurso de los propios terroristas que tratan de justificar el uso de la violencia contra inocentes.
Las obligaciones de las víctimas y los verdugos
La Presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo quiso señalar que "Nuestra obligación como demócratas es defender los principios de verdad, memoria, dignidad y justicia, con el fin de impedir que quienes han causado tanto dolor queden impunes, puesto que esa impunidad no hace más que acrecentar el sufrimiento de las víctimas quienes nunca hemos creído en la venganza, porque ello sería una expresión de injusticia, pero sí apostamos por una justicia que ayude a cerrar todas las heridas".
También quiso dejar claro cuáles son las obligaciones de los que empuñaron las armas, ejecutaron a sangre fría o pusieron las bombas que terminaron con la vida de miles de inocentes, señalando que "es obligación de los grupos terroristas disolverse de manera incondicional, abandonar las armas, condenar cada uno de los atentados cometidos, pedir perdón a las víctimas y colaborar con la justicia con el fin de esclarecer los cientos de crímenes que, a día de hoy, continúan pendientes de sentencia judicial".
El discurso finalizó con una solicitud a los parlamentarios que estaban representando en el acto a la gran mayoría de los grupos que componen la Cámara, que continúen haciendo de su día a día parlamentario una defensa de los valores que han acompañado a las víctimas del terrorismo, con fortaleza y sentido democrático.
El acto terminó con un minuto de silencio con el que todos los asistentes, en pie, rindieron un merecido homenaje a las víctimas del terrorismo.