La comisión de Cultura, celebrada en la Cámara Alta, ha aprobado hoy una moción, por la que se insta al Gobierno a contribuir al impulso de todas las actividades con motivo de la conmemoración del VII Centenario de la muerte del filósofo mallorquín Ramón Llull. La senadora por Mallorca, Catalina Soler, ha asegurado que el legado del filósofo es tan importante que es necesario que se siga difundiendo, con la colaboración del Ministerio de Educación y Cultura.
La biografía de Ramón Llull es tan extensa como amplia, antes de convertirse en fraile franciscano, se casó y tuvo dos hijos; fue filósofo, escritor, clérigo y futuro doctor de la Iglesia. La senadora popular destacó “que era un hombre de firmes convicciones y prioridades, avanzado en su época y autor de unas 240 obras literarias”.
Llull es el creador de la corriente filosófica y religiosa llamada “lulismo” que, 700 años después de su muerte, sigue manteniéndose igual y en plena vigencia histórica, social y cultural. En su intervención, Catalina Soler, ha explicado que el filósofo ocupa un lugar privilegiado en las teorías del pensamiento gracias al gran legado enciclopédico y ecléctico que nos ha dejado.
La senadora balear ha asegurado que “transcurridos 700 años desde su muerte, es hora de que sus conciudadanos, la gente de Mallorca y de toda España, reconozcan como se merece una figura única en la evolución de la cultura, la ciencia y la espiritualidad por todo el mundo. Una figura íntimamente ligada, de forma indisoluble, con la tierra que le vio nacer, crecer y aprender.
El paso dado por el Senado con la aprobación de esta Moción contribuye no sólo a ensalzar la figura de Ramón Llull, sino a salvaguardar la cultura de nuestro país.