En esa discrepancia subyace un debate de fondo que no es otro que muchos miembros de esta Cámara pretenden que la Guardia Civil pierda su carácter militar.
El portavoz de defensa del Grupo Popular, Vicente Ferrer, resaltó hoy el “amplísimo consenso” conseguido en torno a la Ley Orgánica del Código Penal Militar, que hoy terminaba su tramitación parlamentaria con el debate en el Pleno del Congreso de las Enmiendas del Senado.
En este sentido, Ferrer recordó que “durante meses, hemos negociado hasta la extenuación” y agradeció el esfuerzo realizado a los portavoces del Grupo Socialista. “El consenso alcanzado llega a la práctica totalidad de la Ley con la excepción de un solo artículo, precisamente el que ha sido objeto de enmienda en el Senado”, explicó, señalando después que ese esfuerzo junto al impulso del ministro de Defensa “ha propiciado el Código Penal Militar más avanzado de los países de nuestro entorno”.
Entre las características del mismo, destacó, entre otros aspectos, que se ha reducido el articulado a la mitad; se ha reformado la jurisdicción militar transfiriendo al Consejo General del Poder Judicial el nombramiento de los jueces militares, lo que consagra su independencia; se han añadido nuevas figuras delictivas para la protección penal del ejercicio de los derechos y libertades de los militares, y se ha tipificado el acoso sexual, los atentados a la intimidad y a la dignidad personal en el trabajo y cualquier tipo de acto discriminatorio.
Para Vicente Ferrer, “existe un amplísimo consenso y la Ley Orgánica del Código Penal Militar es hija de ese acuerdo respaldado por la mayoría de esta cámara, pero discrepamos en un artículo, aquel que define la extensión en que este Código Penal es aplicable a los miembros de la Guardia Civil”.
En esa cuestión subyace un debate de fondo, explicó el portavoz popular, que no es otro que “muchos miembros de esta Cámara pretenden que la Guardia Civil pierda su carácter militar”. “Algunos lo harían por Real Decreto de hoy para mañana y otros son más proclives a ir despojando al instituto, poco a poco, de todas aquellas características y atributos que le confiere su condición militar hasta que el asunto caiga como fruta madura”, añadió.
Así, el portavoz popular calificó como “error mayúsculo” considerar que el carácter militar de la Guardia Civil es “una anomalía, una vieja singularidad española”. “Los cuerpos que aúnan condición militar y policial son cosa de estos tiempos, se les conoce como cuerpos de gendarmería y son tan de estos tiempos que están siendo potenciados por todos los países, incluida España, que disponen de ellos”, explicó.
“No constituyen ninguna anomalía, ni singularidad española; un vistazo al vecindario más próximo nos permite observar cuerpos análogos en Portugal, Francia o Italia, y todos ellos tienen su origen y sirven a regímenes plenamente democráticos, como es el caso de la Guardia Civil”. “La única diferencia que yo observo, en mi modesta opinión, es que la Guardia Civil es el mejor cuerpo de gendarmería del mundo”, aseguró Ferrer.
Asimismo, recordó, “no tendría sentido alguno mantener separados dos organizaciones policiales que fueran exactamente iguales; si estos cuerpos perdieran su carácter militar, serían inmediatamente absorbidos por las correspondientes policías de cada país y desaparecerían, que parece ser el objetivo de algunos”.
El portavoz popular terminó su intervención preguntando a la oposición si cree honestamente que los ciudadanos de este país desean que desaparezca la Guardia Civil, una pregunta que para el PP tiene una respuesta negativa.