El acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y las cinco Comunidades Autónomas de las cuencas del Tajo, Segura y Júcar (Extremadura, Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y Región de Murcia) permitirá culminar la planificación hidrológica de España con el máximo consenso y aportará estabilidad al acueducto Tajo-Segura.
El acuerdo plasma una política seria y responsable en materia de agua, con medidas que garantizan la sostenibilidad del sistema, con el consenso entre las partes y apostando por la complementariedad de las
fuentes de abastecimiento, en lugar de la exclusión.
El acuerdo no fue posible con el anterior Gobierno Socialista, que utilizó el agua como elemento de enfrentamiento entre las Comunidades Autónomas, no como elemento de solidaridad.
El acuerdo, con rango de Ley, aporta estabilidad al Trasvase Tajo- Segura, tras 35 años de funcionamiento. Con él se evitan las
presiones coyunturales en la toma de decisiones, se introducen normas para dotar de transparencia a los trasvases intercuencas, se garantizan las necesidades de las cuencas cedentes y se facilita la utilización de las infraestructuras, la cesión de derechos y la preferencia de las cuencas cedentes con carácter general.
Se establece una reserva de 400 hectómetros cúbicos en los embalses de cabecera del Tajo, por debajo de la cual no se autorizan trasvases. Al mismo tiempo, se acometerán un gran número de obras que van a mejorar el funcionamiento de la capacidad de almacenamiento, de laminación y de regulación.
El PP defiende la oportunidad de la reforma de la Ley de Responsabilidad Medioambiental