El Grupo Socialista de las Cortes de Castilla-La Mancha votó en contra de la constitución de una comisión de investigación sobre la situación de Caja Castilla-La Mancha, una vez ha sido intervenida por el Banco de España.
Para el Grupo Popular, la postura del presidente socialista, José María Barreda, ha sido una "huida en toda regla y una muestra más de su cobardía y cinismo, al encerrarse en su despacho durante esta votación y dejar solo al Grupo Socialista", ante una petición tan clara como la formulada por el Partido Popular, "para que de una vez por todas se aclarase lo que ha sucedido en CCM, con la dejación de responsabilidades del Gobierno socialista".
Por ello, el Partido Popular se pregunta "¿qué oculta el presidente socialista, al no permitir la apertura de esta comisión?", sin que nadie explique qué ha ocurrido con el presunto agujero patrimonial, los créditos concedidos a empresas amigas del Gobierno socialista, la falta de liquidez y las actuaciones de un ex presidente de CCM nombrado y arropado por el Gobierno de Barreda".