Agradece a los grupos ecologistas que desmintieran a Cristina Narbona cuando vinculó el incendio en Doñana con la modificación de la Ley de Montes de 2015.
La portavoz de Medio Ambiente del Grupo Parlamentario Popular, María Teresa de Lara, ha propuesto este miércoles en el Congreso, a través de una iniciativa presentada por su formación, incrementar la eficacia y la seguridad en la extinción de los incendios forestales con actuaciones en la zona que separa el monte de las urbanizaciones, conocida como interfase urbana-forestal.
En su intervención en la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente con motivo del debate de dicha iniciativa, a instancias del GPP, De Lara ha comenzado agradeciendo a todos los efectivos que han participado en la lucha contra el incendio declarado estos días atrás en el entorno del Parque Natural y del Parque Nacional de Doñana.
De Lara ha hecho igualmente extensible su agradecimiento al grupo de ecologistas que, en redes sociales, han desmentido a la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, por relacionar, "de manera indecente", este incendio con la modificación de la Ley de Montes de 2015. "Les recuerdo que el artículo 50 de la citada norma", ha explicado, "especifica claramente que se prohíbe el cambio de uso forestal por razón de incendio en un plazo de 30 años y, desde luego, las excepciones que contempla nunca podrían ser de aplicación ni en un Parque Nacional ni en un Parque Natural, como es el caso que nos ocupa".
"Faltar a la verdad reiteradamente es poco ético", ha dicho De Lara sobre las palabras de Cristina Narbona, para advertir a continuación que cada vez son más frecuentes en los incendios forestales imágenes de evacuación de poblaciones, al amenazar el fuego los núcleos urbanos y las viviendas donde residen.
"El aumento de la superficie forestal de España y un mayor contacto de esta superficie con ámbitos urbanos serían los causantes de esta intervención", de ahí la presentación de esta iniciativa, cuyo objetivo, ha manifestado la portavoz popular, "es aumentar la eficacia y la seguridad en la defensa frente a los incendios forestales en el ámbito de la interfase urbana-forestal, realizando para ello una identificación en la cartografía oficial y elaborando una cartografía de la habitabilidad del monte basada en criterios de riesgo de incendios, capacidad de respuesta defensiva, así como la existencia de infraestructuras, recursos y planes de autoprotección".