El PP lleva ante la Comisión Europea las injerencias del Gobierno en Telefónica

La portavoz del Partido Popular en el Parlamento Europeo y vicepresidenta del PPE, Dolors Montserrat, ha denunciado ante la Comisión Europea las injerencias del Gobierno de Pedro Sánchez en Telefónica.

“Pedro Sánchez ha orquestado esta operación a cara descubierta como parte de una exhibición de poder para poner a Telefónica de rodillas y someterla a los intereses del gobierno. Es pura injerencia y matonismo político que pone en riesgo la imagen y el prestigio de una de las principales empresas de nuestro país que hacen marca España”.

Montserrat indica que el hecho de que el jefe de la Oficina Económica del Gobierno, Manuel de la Rocha, fuera el encargado de comunicar el pasado 18 de enero, en Moncloa, a José María Álvarez-Pallete su salida de la Presidencia de Telefónica es una prueba más de la deriva autoritaria y de control en la que está sumida el Ejecutivo de Pedro Sánchez. 

El Gobierno ha justificado el cambio en los “nuevos accionistas”, cuando en realidad es voluntad del propio Ejecutivo a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), dependiente del Ministerio de Hacienda.

La eurodiputada recordó en este sentido que la compra en mayo de 2024 del 10% de las acciones, por 2.285 millones de euros, salieron de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), originalmente previstos para autonomías y ayuntamientos, por lo que “Sánchez coloniza Telefónica para su interés, pero la operación la pagamos todos””.

Montserrat ha indicado a la Comisión precisamente que el Gobierno no esconde su afán de colonizar la dirección de Telefónica, como ya ha hecho en Indra, Hispasat, Correos, RTVE, el Instituto Nacional de Estadística y el CIS.

Con el objetivo de obtener una respuesta escrita, la diputada ha planteado: “¿Está la Comisión preocupada por los movimientos gubernamentales para ejercer un control desproporcionado sobre empresas a través de instrumentos como SEPI que atentan contra los principios del mercado único europeo, la competencia justa y la neutralidad competitiva?“.

Asimismo, pregunta sobre si la Comisión Europea cree que “las intromisiones estatales en empresas participadas pueden desincentivar la entrada de nuevos competidores en el mercado, ahogando la diversidad empresarial que promueve el mercado único”.