El portavoz popular de Asuntos Iberoamericanos, encargado de defender una moción del PP sobre Cuba, ha denunciado que los socialistas españoles estén empeñados "en desenterrar a dictadores muertos, mientras se niegan con contumacia a condenar a los que están vivos y llevan 50 años reprimiendo".
En su defensa de la moción, García Carnero ha calificado la muerte del preso político cubano, tras 85 días en huelga de hambre, como "un trágico acontecimiento" que puede repetirse en breve, en la persona del periodista Guillermo Fariñas, si gobiernos democráticos, como el español, no hacen todo lo que esté en sus manos para evitarlo.
El senador del PP ha recordado que Zapata no era un criminal, sino un preso político, que condenado por defender la dignidad y la libertad, fue sometido a torturas y golpes, que se sumaron a la huelga de hambre que consumó hasta la muerte.
Por ello, ha reclamado al Ejecutivo que reconsidere seriamente su pretensión insólita de cambiar, contra toda lógica política y democrática, la posición común europea respecto a Cuba.
El parlamentario popular ha lamentado, por último, que el PSOE haya sido incapaz de aceptar la enmienda transaccional que le ha ofrecido el PP, en la que daba acogida a todos los puntos de la enmienda socialista, sumados a la condena de la muerte de Zapata y la no modificación de la posición común.