El Grupo Popular en el Congreso ha presentado una Proposición no de Ley relativa al proceso de homologación y convalidación de títulos extranjeros de educación superior. Mediante esta iniciativa, para su debate en Pleno, el PP exige al Gobierno que dichas titulaciones se convaliden de forma rápida.
En concreto, los populares instan al Gobierno a dotar al Ministerio de Educación de los recursos humanos y medios materiales necesarios, que permitan agilizar los expedientes de homologación y convalidación de títulos y estudios extranjeros de educación superior, con el objetivo de la incorporación rápida y correcta al mercado laboral español de todas aquellas personas que lo soliciten.
Según señala la iniciativa del PP en su exposición de motivos, los trámites administrativos no pueden convertirse en la gran dificultad que tienen muchas personas que solicitan la homologación de sus títulos universitarios extranjeros, ya que está demostrado que un tiempo excesivo en la resolución de estas solicitudes suele implicar un desaprovechamiento del talento y de las oportunidades laborales.
En este sentido, la Proposición no de Ley recuerda que el artículo 15.1 del Real Decreto 285/2004, de 20 de febrero, por el que se regulan las condiciones de homologación y convalidación de títulos y estudios extranjeros de educación superior, modificado por el Real Decreto 309/2005, de 18 de marzo, establece que "el plazo para resolver y notificar la resolución del procedimiento será de seis meses, a contar desde la fecha en que la solicitud haya tenido entrada en cualquiera de los registros del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte".
Sin embargo, el PP advierte que, en la práctica, el proceso de homologación y convalidación de títulos académicos extranjeros de educación superior resulta en su totalidad un trámite que puede durar varios años desde que se inicia la solicitud del expediente.
Consecuencias negativas
Asimismo, desde el PP considera que estos retrasos producen unas consecuencias muy negativas para nuestra sociedad ya que, por un lado, hay profesionales con experiencia que podrían cubrir puestos que se demandan pero que quedan vacantes, lo que supone una pérdida de extranjeros cualificados que no pueden desarrollar su labor y, por otro, porque la situación afecta también a españoles que han cursado estudios en el extranjero y tienen dificultades para trabajar mientras no se resuelva la homologación del título solicitado.
La Proposición no de Ley advierte también de que este problema afecta a la productividad y competitividad de nuestro país, ya que se está desaprovechando un capital humano cualificado y obligando a estas personas, en su mayoría extranjeras, a realizar trabajos muy por debajo de su nivel de formación.
"El verdadero problema no es el padrón, es la política de inmigración del Gobierno"