El PP afirma que "invertir en Defensa no es despilfarro, sino responsabilidad y sensatez"

En su intervención en la Comisión de Defensa del Congreso, tras la comparecencia del secretario de Estado de Defensa, Ferrer recordó que en nuestro país hay 50.000 familias que dependen de este sector y la importancia del mismo para la investigación del país.

En este sentido, el portavoz del GPP señaló que España invierte en armamento el 0.6% de su PIB y el 0,9% si sumamos el gasto extraordinario que suponen los Programas Especiales de Armamento.

No obstante, advirtió que si nos comparamos con los países de nuestro entorno, con los países de la UE, “somos el tercero por la cola porque sólo Estonia y el Gran Ducado de Luxemburgo gastan menos que España en Defensa”. “No es que seamos un país que gasta mucho, es que somos uno de los tres países de la UE que menos invierte en su defensa”, subrayó. 

Asimismo, el diputado del PP señaló que “el Gobierno socialista gastó en Defensa, todos los años, más de lo que ha gastado este Gobierno en los dos Presupuestos que hasta el día de hoy ha aprobado”.

Por otra parte, calificó de “torpeza, gravísimo error y notable irresponsabilidad“, plantear el debate sobre la inversión en armamento en torno a quién ha generado el gasto, ya que “el PP no tiene a este respecto nada que esconder ni temor alguno a plantear el debate en estos términos”.

También recordó Ferrer que los gobiernos de la UCD, el PSOE y del Partido Popular “hicieron un enorme esfuerzo para dotar a nuestras Fuerzas Armadas, de tal manera que pudieran hacer frente a las obligaciones que la Constitución les imponía y el prestigio y la posición que nuestro país les reclamaba”. 

“Esto es algo de lo que todos deberíamos sentirnos orgullosos en lugar de arrojárnoslo a la cabeza”, dijo el diputado del PP, quien añadió que lo que los ciudadanos esperan de nosotros “es que seamos capaces de llegar a los acuerdos que nos permitan que los tiempos que nos han tocado vivir no arruinen el esfuerzo de tantos años, por el bien de la defensa de nuestro país y la seguridad y la libertad de sus ciudadanos”.

PROGRAMAS ESPECIALES DE ARMAMENTO

El portavoz de Defensa del GPP también afirmó que los Programas Especiales de Armamento “son una cuestión clave en el entramado de la Defensa de España”.

En este sentido, destacó que, en relación con los mismos, son cuestiones fundamentales, cuál era la situación de partida, una situación financiera insostenible agravada por los impagos de 2010 y 2011 y unos techos de gasto desactualizados y falta de control económico, industrial y tecnológico.

Así, explicó que el Ministerio ha hecho frente a esta situación saldando la deuda pendiente a fecha de 2011 para poner el contador a cero y restablecer la credibilidad de España. Además, el Ministerio que dirige Morenés ha modificado los contratos para aplazar las devoluciones de los préstamos de industria y ha negociado con las empresas para reconducir los programas y ajustarlos a la nueva realidad.

Igualmente, añadió que el Ministerio se dispone a aprobar una reprogramación y un nuevo techo de gasto y ha realizado un enorme esfuerzo para mejorar el modelo de gestión.

Ferrer explicó que todo esto se ha hecho con los objetivos claros de dotar a las Fuerzas Armadas con los equipos preparados para su entrada en operación, con los que puedan cumplir las misiones que se les encomiendan; reducir los compromisos de pagos asociados a los PEAS y modular el impacto de déficit de estos programas y, por último, diseñar un escenario de recuperación que abra las puertas a la posibilidad de abordar nuevos programas y ofrezca un horizonte de optimismo para la industria de defensa.

RESULTADOS

Así, destacó que “los primeros resultados están a la vista”, ya que el impacto sobre el déficit se ha reducido un 63% y las necesidades de financiación en una horquilla que va del 42%, en el supuesto menos favorable, hasta un 53% en el más, y se produce una reducción del techo de gasto de siete mil millones de euros. 

Por último el portavoz de Defensa del GPP sumó al Ministerio de Defensa en el esfuerzo colectivo de lucha contra la crisis económica, “esfuerzo al que nuestros militares se han unido desde el primer momento, con la dedicación y la capacidad de sacrificio que les caracteriza, adaptándose en todo momento a los tiempos y las necesidades del país, pero manteniendo su capacidad para hacer frente a las responsabilidades que la Constitución les impone y a las obligaciones internacionales que a España se le exigen”.