El PP afirma que el acceso de las mujeres a la educación conlleva sociedades más justas e igualitarias

La diputada del Grupo Popular Arancha Miguélez, afirmó hoy que "la igualdad de género no sólo redunda en una mejora de la vida y condiciones de las mujeres, sus familias y comunidades, sino que el acceso de las mujeres a la educación suele ser directamente proporcional a Estados y sociedades más justas e igualitarias".

Con estas palabras defendía la diputada en la Comisión de Cooperación Internacional para el Desarrollo una Proposición no de Ley del Grupo Popular relativa a la promoción de la Educación en Igualdad en el ámbito de la cooperación internacional para el desarrollo.

En este sentido, Miguélez instó al Gobierno no sólo a continuar promoviendo el apoyo a programas que incorporen la materia de género, el refuerzo de la calidad educativa y la equidad en la educación, sino también a apoyar los mecanismos necesarios para que se cumpla internacionalmente el derecho a la educación de las personas, incluidas mujeres y niñas.

IV Plan Director de la Cooperación Española 
Arancha Miguélez también se refirió al IV Plan Director de la Cooperación Española 2013-2016, en el que la promoción de los derechos de las mujeres y la igualdad de género se consideran como seña de identidad de la cooperación española y una de las ocho prioridades de dicho Plan.

"La educación debería ser el pilar fundamental para lograr la autonomía de las mujeres", indicó la diputada popular, quien añadió que "lograr la inclusión de la igualdad de género en todas las políticas educativas exige un compromiso cuantitativo y cualitativo que sea medible y evaluable".

No obstante, la portavoz popular advirtió que, aunque en los últimos años se ha avanzado en la legislación en materia de género y educación, "es necesario un mayor esfuerzo político, económico, técnico y de recursos humanos para que esto sea una realidad consolidada".

En su opinión, "las causas que motivan el abandono y la baja escolarización de niñas y adolescentes debe ser una preocupación de los Estados y deben ser asumidas en todas las políticas sociales, culturales y familiares, no sólo educativas".