Pons pide fortalecer la defensa europea, reforzar las relaciones con la OTAN, apostar por la industria de defensa y mejorar la coordinación

El vicesecretario de Institucional del PP afirma que hay que reforzar la Política Común de Seguridad y Defensa y la relación con la OTAN como “principales prioridades de la UE ante los crecientes retos y amenazas”

Durante la LXXII Conferencia de Comisiones Parlamentarias de Asuntos Europeos que se celebra en el Parlamento de Budapest, explica que hay que dotar a la defensa europea de más “fuerza, autonomía y capacidad para complementar a la OTAN”, porque “una defensa europea fuerte significa un pilar robusto para la Alianza”

Afirma que la UE necesita una Estrategia Europea de Defensa común que permita responder de forma “colectiva y coordinada” ante amenazas que van más allá del concepto de Estado”. “La defensa y la seguridad han sido tradicionalmente competencia de los Estados Miembros, sin embargo, la Unión debe convertirse en el complemento para proteger nuestros objetivos e intereses”, señala

Pide reforzar la industria de defensa europea mediante inversiones, tanto en innovación como en investigación, para así poder competir de tú a tú con otras potencias. “Eso incluye armonizar procesos de construcción y adquisición, compras centralizadas, y un mayor nivel de integración”, subraya

Argumenta que el objetivo primordial es comprender que “sin la cooperación entre los Estados miembros, no llegamos a ningún sitio”. “La Unión Europea no es un competidor de los Estados, sino un instrumento al servicio de ellos”, sentencia

Pide asumir una “mayor responsabilidad compartida, también en seguridad y defensa” para, entre otras cosas, asegurar respuestas rápidas y coordinadas y que Ucrania reciba todo el equipamiento sin restricciones ni dilaciones innecesarias así como invertir en tecnologías de defensa avanzadas

Considera que a nivel internacional “es vital intensificar la cooperación con aquellos países que compartimos principios como el imperio de la ley, la democracia y el libre mercado”

Alerta de que “los valores de la democracia, la libertad y el respeto al Derecho internacional”, están siendo amenazados, y el entorno en el que nos movemos se vuelve cada vez más “impredecible e inestable” donde los Estados Nación se vuelven en la irrelevantes en la práctica”

Insiste en que la UE “no es un competidor en materia exterior para nuestros Estados”, sino “el instrumento necesario para garantizar que Europa no quede encerrada de nuevo en medio de una disputa que dirigen otros”

Pide hacer una autocrítica ante una polarización política que ha llegado a tal extremo que a veces “encontrar el compromiso equilibrado, el justo medio, se vuelve una misión casi imposible”