El portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, ha asegurado hoy que el dato del IPC registrado en marzo -que ha caído por primera vez en negativo con una tasa interanual del -0,1%- supone para la economía española "muchos más riesgos que beneficios".
Montoro ha considerado que aunque pueda parecer que esta drástica caída de los precios mejora la capacidad de compra de los ciudadanos en general, para el empresario supone un incremento de la incertidumbre porque pierde en el valor de venta de sus productos.
El dirigente popular ha explicado que cuando los precios bajan de una forma generalizada se hace mucho más difícil la contratación de parados y las inversiones empresariales productivas. "Si las empresas no tienen la garantía de que los precios por lo menos se van a mantener, les es mucho más difícil invertir y contratar a más trabajadores", ha afirmado.
Lo mismo ocurre también -ha continuado- con el endeudamiento privado y empresarial del autónomo: si no existe la garantía de que se van a mantener los precios, a los autónomos no sólo les es más difícil invertir en su negocio, sino también realizar gastos de consumo privado como la compra de un automóvil o la compra de una vivienda.
"El IPC de hoy confirma el primer dato de deflación de la economía española. Esto es una situación totalmente nueva para España y muy peligrosa para la recuperación económica. Lo ideal en la economía es tener una inflación moderada, que el Banco Central Europeo sitúa en un 2%", ha manifestado.
Montoro considera que nuestra economía no está preparada para una situación como ésta, y que el Gobierno debía haber emprendido hace tiempo reformas estructurales para adaptar nuestras instituciones a una situación de inflación negativa o muy baja.