“Los Presupuestos de Sánchez se sustentan en una gran mentira. Todos los indicadores económicos, nacionales e internacionales, dicen que el Gobierno de España basa sus previsiones económicas en una gran falsedad porque vamos a crecer menos de lo que dice el Ejecutivo”.
Califica las previsiones del Ejecutivo de “propaganda” y advierte de que están “infladas”, como detalla el Fondo Monetario Internacional o el Banco de España. “Ya vuelven con los brotes verdes”, ha ironizado.
Exige a Sánchez que “diga la verdad” y que aborde las reformas estructurales que nuestro país necesita y sobre las que Pablo Casado ya ha hecho propuestas.
“Sánchez está cada día más alejado de la España real. Si se atreviera a bajar del Falcon y a pisar la calle, escucharía que los españoles están cada vez más preocupados por su economía doméstica porque, entre otros, suben los carburantes, la cesta de la compra, la electricidad”.
Apunta a que hay que leer “la letra pequeña” de los datos de la Encuesta de Población Activa y pide avanzar en la flexibilidad del mercado laboral a través de la mochila austriaca, como lleva meses proponiendo Pablo Casado, así como el Banco de España, la Unión Europea y la propia vicepresidenta Calviño.
Reitera que el PP no va a apoyar “la contrarreforma laboral” porque “nosotros queremos lo mejor” e insiste en que su partido “no es muleta de Sánchez, somos alternativa de gobierno y tenemos nuestras propuestas”.
Destaca que el presidente del PP tomó la iniciativa y llamó al jefe del Ejecutivo para hablar sobre la crisis en Ucrania, pero insiste en que Sánchez debe comparecer en el Congreso de los Diputados y poner orden en su propio gabinete.
“Tenemos un presidente del Gobierno que es alérgico a acudir al Congreso de los Diputados y a someterse al control parlamentario”.