El GPP propone al Gobierno adelantar la vacunación de la gripe estacional este año, para diferenciarla del coronavirus y facilitar el trabajo a los sanitarios

- El Grupo Parlamentario Popular ha presentado una Proposición no de Ley en el Congreso en la que propone al Gobierno adelantar este año todo lo que se pueda, atendiendo a criterios científicos, la vacunación de la gripe estacional que habitualmente se realiza en octubre, como una medida más de prevención y diferenciación en relación al coronavirus.

Dicha medida iría incluida, según plantea el GPP, en una estrategia integral del Ejecutivo, coordinada con las Comunidades Autónomas y las sociedades científicas, para garantizar un abordaje adecuado de la gripe estacional en la campaña 2020 en todo el Sistema Nacional de Salud, ante la crisis generada por el COVID-19.

A juicio del GPP, la citada estrategia deberá prepararse cuanto antes para intentar llegar este año a la mayor cantidad viable de población, con un adelanto de la vacunación estacional con el objetivo de “facilitar en la medida de lo factible un diagnóstico diferencial claro” de la gripe respecto al coronavirus.

En la exposición de motivos de la iniciativa, suscrita por la portavoz Cayetana Álvarez de Toledo, la vicesecretaria del PP Cuca Gamarra, el portavoz adjunto del GPP José Ignacio Echániz y la portavoz de Sanidad del GPP, Elvira Velasco, se recuerda que las campañas de vacunación frente a la gripe estacional suelen iniciarse en el mes de octubre, pero que el contexto epidemiológico español se ha visto seriamente alterado este año por el coronavirus (COVID-19).

Por ello, con el objetivo de mejorar el diagnóstico diferencial de la gripe estacional con respecto al referido COVID-19, el GPP propone dichas medidas, teniendo en cuenta además que durante la temporada 2018/2019 en nuestro país se produjeron 490.000 casos leves de gripe que acudieron a las consultas de atención primaria, hubo 35.300 hospitalizaciones con gripe confirmada por ensayos de laboratorio, se produjeron 2.500 ingresos en unidades de cuidados intensivos y se certificaron 6.300 muertes asociadas a la gripe.