“Son unos Presupuestos agridulces para los ayuntamientos e insuficientes para hacer frente a las necesidades que todavía existen derivadas de la pandemia”, ha dicho.
El vicesecretario de Territorial del PP, Antonio González Terol, ha mantenido hoy una reunión telemática con alcaldes y portavoces del PP en municipios de menos de 15.000 habitantes de Asturias, Cantabria y Galicia para analizar, entre otros asuntos, el impacto del proyecto de los PGE 2022 a nivel municipal. “Son unos Presupuestos agridulces para los ayuntamientos e insuficientes para hacer frente a las necesidades que todavía existen derivadas de la pandemia”, ha dicho.
A su juicio, los Presupuestos no cumplen con las expectativas de las entidades locales: no contemplan el fondo COVID de 3.000 millones de euros ni un fondo extraordinario para hacer frente “a las subidas desorbitadas del precio de la luz que va a dificultar cubrir las necesidades en un invierno que será frío y cuyas perspectivas de bajar no son nada previsibles a corto plazo”. Por otro lado, desaparece el fondo adicional de transportes, salvo para algunas capitales. “El transporte interurbano rural, otra vez desasistido”, denuncia.
Para González Terol “solo hay una buena noticia”: la devolución del IVA de diciembre de 2017 a los ayuntamientos gracias a los recursos ganados por los gobiernos de Galicia y Castilla y León por el IVA que se debía a las CCAA. Sin embargo, remarca que es una devolución parcial y que el PP exige que se devuelva en su totalidad.
Respecto a los fondos europeos, señala que se han presupuestado 2.050 millones de euros para los municipios lo que a su juicio es una “cantidad muy alejada de la que piden” y adelanta que el PP reclamará que se alcance el 14´56% de los 140.000 millones de euros que corresponden a España. “Seguiremos reclamando fondos europeos en cuantía suficiente para llegar a los municipios más despoblados y que se flexibilicen las condiciones para ejecutar los proyectos”.
Asimismo, González Terol aboga por que el lobo “vuelva a ser una especie cinegética, cazable al norte del Duero y recuperar el statu quo que existía antes de su protección total para garantizar la sostenibilidad de la ganadería extensiva”. ç
En cuanto a la Ley de Bienestar Animal, considera que regular el número máximo de tenencia de perros es un ataque directo al mundo rural donde existen las realas y un obstáculo a los aprovechamientos cinegéticos que nutren de beneficios a los municipios pequeños.
“Defendemos la racionalidad en las políticas de protección y bienestar animal, pero rechazamos los daños colaterales que ocasiona en el mundo rural, condenado a no poder levantar cabeza y perder las pocas posibilidades de subsistencia que todavía tienen. El mundo rural es un mundo de oportunidades y debemos promoverlas, no prohibirlas”, ha concluido.
González Terol: “Los PGE 2022 son agridulces e insuficientes para los ayuntamientos”
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