Fúnez reivindica el Plan de Vivienda de Feijóo frente al “muro” de Sánchez que impide a los jóvenes emanciparse

La vicesecretaria de Organización defiende el Plan de Vivienda del PP, que incluye bajada de impuestos, exenciones fiscales para jóvenes, más seguridad y menos burocracia 

Rechaza la política intervencionista del Gobierno, que ha reducido la oferta de viviendas y ha supuesto un incremento de los precios, y apuesta por poner más suelo para construir, reduciendo así el déficit de viviendas

Aboga por dar seguridad a los propietarios para aumentar el número de inmuebles en alquiler y por terminar con la okupación, tal y como recoge la ley del PP aprobada en el Senado y paralizada en el Congreso 

Pone en valor las medidas dirigidas a los jóvenes que contempla el plan, como la Hucha Hogar Joven con deducciones fiscales para facilitar la compra de vivienda premiando el ahorro 

Censura la inacción del Ejecutivo en este ámbito y las promesas incumplidas de Sánchez, y lo ejemplifica en las 184.000 viviendas anunciadas por el jefe del Ejecutivo en campaña, que a día de hoy se han convertido en “184.000 frustraciones” 

Asegura que el Plan de Vivienda del PP afronta el problema de manera real y efectiva, y es fruto del diálogo con ayuntamientos y comunidades autónomas 

Critica la debilidad parlamentaria del Gobierno de Sánchez, cada vez más acorralado por la corrupción, y las continuas cesiones del Ejecutivo a los independentistas

“Necesitamos un Ejecutivo fuerte y unido, no un Gobierno que ponga precio a la igualdad de los españoles”, asevera la dirigente popular, quien asegura que Sánchez está dispuesto al “todo vale para seguir en Moncloa” 

Denuncia que, tras los indultos, la amnistía y la condonación de la deuda, el sanchismo va a ceder al independentismo las competencias en extranjería, control de fronteras e inmigración 

“Todo ello supondrá una dura consecuencia para los españoles: la ruptura del Estado de derecho y de la igualdad ante ley y el acceso a los servicios públicos” 

Señala que el acuerdo con Puigdemont evidencia la fragilidad de Sánchez, a quien acusa de estar sacando a España de Cataluña con cada una de las cesiones que le garantizan continuar en el Gobierno