Durante el debate “¿Es España un país moderno?”, de la Escuela de Verano del PP, el secretario de Estado de la Oficina Económica de Moncloa, Alvaro Nadal, ha destacado que España es un ejemplo de modernización, que ha trabajado duro y que ha hecho que en dos generaciones sea uno de los países que más ha avanzado del mundo, aunque todavía hay áreas en las que hay que evolucionar. En este sentido, ha recordado que se ha hecho un esfuerzo increíble con la modernización política, “con la transición”, y la económica, con los gobiernos del PP, durante la segunda mitad de los años 90 y actualmente, con las medidas que nos están llevando a la salida de la crisis.
Así, ha explicado que esta modernización es fruto de las reformas del centro derecha, ya que la izquierda es inmovilista, porque no quiere que se reforme ni lo que va mal. “Protestan salen a la calle, hacen soflamas”, ha señalado antes de preguntarse cuáles han sido las mejoras de los gobiernos socialistas y cuál es el resultado de sus políticas después de tantos años gobernando en nuestro país.
También ha reconocido que hay cosas que necesitan cambiar, pero que sólo el Partido Popular y sus gobiernos son los que son responsables, llevan a cabo las reformas y tiran del carro. Así, estamos haciendo ahora mismo otro impulso de modernización cuyos resultados veremos dentro de algunos años. “Es reforma, no revolución”, ha afirmado antes de explicar que es un trabajo duro, que se cambia poco a poco, que es un esfuerzo basado en nuestros valores y que para él, “es un privilegio formar parte del PP, y poner en marcha estas reformas que necesita España”.
Nadal ha terminado su intervención destacando que nadie nos modernizó, que “lo hicimos con nuestro esfuerzo” y que nuestro país es admirado en el mundo, donde se reconocen su progreso y avances, esencialmente por la transición política modélica y por haber dado un salto en lo económico y en lo social como nadie ha hecho.
Por su parte, Pablo Zalba ha destacado que Europa ve a España mejor de lo que nosotros nos vemos y que somos los más críticos con nosotros mismos, que no nos creemos el gran esfuerzo que estamos haciendo para salir adelante. “Hoy es un orgullo ser español, nos ven con admiración”, ha afirmado.
Zalba ha explicado que el símbolo de nuestra modernidad es la capacidad de reacción y adaptación que hemos tenido ante la crisis y que esto se demuestra, entre otros datos, con nuestras cifras de aumento de las exportaciones, que se han duplicado en dos años gracias a las reformas impulsadas por el Gobierno y al esfuerzo de los ciudadanos, frente a los 6 años que le costó a Alemania duplicar las suyas. También ha destacado la importancia del sector de la automoción o el agroalimentario.
Además, ha hablado de la situación de Cataluña, y ha denunciado que Mas miente a los catalanes cuando les dice que Cataluña será algo fuera de la UE, porque todos los dirigentes europeos han negado esta posibilidad y ninguna región puede independizarse de un Estado miembro “porque al minuto siguiente está fuera de la Unión Europea y fuera hace mucho frío”.
Por su parte, la vicepresidenta de la Mesa del Congreso, Dolors Monserrat, se ha referido a la llamada de Mariano Rajoy a Artur Mas para reunirse con él en la Moncloa y dialogar sobre la situación de Cataluña dentro del marco legal, destacando el respeto que ha demostrado el presidente del Gobierno hacia las instituciones catalanas, algo que no hace el presidente de Cataluña con las instituciones españolas.
Monserrat ha insistido en la necesidad de recuperar el orgullo de ser españoles, de recuperar un patriotismo sereno y sin complejos, y ha exhortado a los jóvenes asistentes a no quedarse paralizados ante los independentistas que quieren romper España, ni ante la izquierda que quiere desmantelar nuestras instituciones, resaltando la fortaleza de las mismas.
Tras asegurar que nuestro país es una gran nación hecha posible entre todos, y que es la 12ª economía del mundo o que nuestra lengua es la segunda más hablada, entre otros campos en los que somos pioneros, Dolors Montserrat ha dicho que el PP no va a permitir que la desmantelen, porque “lo más moderno es sentirnos españoles y vivirlo sin complejos”.
Por último, para que los ciudadanos recuperen la confianza en las instituciones, la dirigente popular ha pedido que se siga luchando desde el Partido Popular por la regeneración democrática y contra la corrupción. En ese sentido, ha defendido la necesidad de hacer leyes que incentiven al que cumple y castiguen al que no lo hace, sorprendiéndose de sentencias permisivas como la del asedio al Parlament de Cataluña. “¿Dónde hemos llegado?”, se ha preguntado.
Borja Sémper también ha confirmado la modernidad de España, porque las políticas del PP han evolucionado con la sociedad y se han adaptado a los cambios respetando, por encima de todo, la libertad del individuo, “que debe ser el eje fundamental de nuestra acción”. Así, ha defendido que los políticos deben evolucionar con las exigencias de los ciudadanos y sus necesidades y deben estar en permanente contacto con ellos, “en permanente conexión, escuchándonos y entendiéndonos”, hecho que se facilita por el desarrollo de las nuevas tecnologías e internet.
“En una época de incertidumbres hay quien puede buscar respuestas a sus miedos en los que tienen respuestas fáciles a los problemas difíciles”, ha denunciado antes de defender la evolución y las reformas frente a los que quieren derribar todo lo que se ha construido hasta ahora. “La modernidad es estar pendientes de mantener el pulso a la ciudadanía y a sus necesidades”, ha concluido.
Por último, la vicesecretaria de Organización de NNGG y diputada nacional, Belén Hoyo, ha dicho en su intervención que los jóvenes del PP, sin ser conformistas, sí consideran que España es un país moderno, que vivimos en un sistema moderno. No creen que haya que destruir este sistema, creen que se puede mejorar, que hay que evolucionar y abordar de forma valiente temas como la regeneración democrática, “en el debate de la regeneración democrática, tenemos que salir al campo y jugar el partido”, ha afirmado.
También se ha mostrado partidaria de defender la honorabilidad de la política, puesto que la mayoría de los políticos son honrados, y ha destacado que hay muchos que ni siquiera cobran por su trabajo desde hace años, que lo hacen por vocación política, que les cuesta dinero y que hay que decirlo.
Belén Hoyo también ha afirmado que no creen en las cuotas por edad ni sexo, que hay muchos jóvenes muy preparados para participar en el partido y las instituciones y hay que contar con ellos, aunque tienen mucho que aprender todavía de las personas con experiencia.