Siento los momentos que están atravesando, siento que tengan que estar en su casa y que probablemente hayan tenido que deshacer sus planes con sus familias, y también sus planes laborales, y que tengan que hacer un gran esfuerzo por responsabilidad.
Por eso comparezco por tercera vez esta semana para decirles que apoyamos la declaración del estado de alarma que ha anticipado el presidente del Gobierno y que aprobará el Consejo de Ministros mañana.
También, que, si hace falta prorrogarlo durante más de quince días, como parece que todo indica, contará con el apoyo del Partido Popular en el Parlamento, en su convalidación, tal y como marca la Constitución.
Estaremos a la altura de las circunstancias, y respaldaremos al Gobierno para aprobar las medidas urgentes y necesarias, que contengan la expansión de esta pandemia del coronavirus.
Ya advertimos que las propuestas de ayer del Consejo de Ministros eran claramente insuficientes y que era necesario un mando único ante una crisis como lo que estamos viviendo en España.
Que el Gobierno debería dejar de sugerir y debería pasar a liderar y dar instrucciones claras para garantizar una coordinación efectiva en la situación de emergencia y de coordinación sanitaria que esta pandemia está exigiendo.
Lo que ayer era una necesidad urgente esta mañana ha sido un clamor cuando hemos visto como el lehendakari declaraba la emergencia sanitaria en Euskadi, que desde Cataluña se confinaban a las personas en los municipios, que en Madrid se decretaba el cierre de comercios o que en Murcia se limitaba los movimientos de personas venidas de otras comunidades autónomas, o en Castilla y León se solicitaba por carta, formalmente, la declaración del estado de alarma.
El control de una epidemia no atiende a límites territoriales, administrativos o competenciales, por eso sin firmeza no podríamos ganar esa batalla.
A lo largo de estas semanas se han cometido por parte del Gobierno graves negligencias como alentar a una manifestación multitudinaria, con miles de personas el pasado domingo. Y se ha ido a remolque de los acontecimientos. Pero tiempo habrá para dilucidar las responsabilidades.
Ahora es el momento de apoyar medidas extraordinarias para situaciones extraordinarias. Hoy, con los nuevos instrumentos con los que cuenta el Gobierno y que el PP respalda, es hora de pasar de ir por detrás de los acontecimientos, a anticiparse a ellos. Es hora de dejar la descoordinación y los titubeos, para pasar a la firmeza y la determinación.
El presidente del Gobierno contara a partir de mañana con los recursos de este gran país a su disposición con todos. Y le pido que los use con determinación y con responsabilidad.
Quiero una vez más enviar todo mi apoyo a los profesionales de la sanidad española por el enorme esfuerzo que están haciendo estos días y quiero también extenderlo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que tendrán que empezar a hacerlo aún más, a partir del día de mañana, para las limitaciones que pueda introducir las nuevas restricciones del estado de alarma.
Todo apunta a que la realidad ha desbordado las previsiones y afrontaremos momentos difíciles.
Pero somos un gran país, una gran nación y superaremos esta crisis como siempre hemos conseguido nuestros grandes logros: con responsabilidad, sacrificio y solidaridad entre todos los españoles.
Muchas gracias.
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Declaración institucional de Pablo Casado
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