La delegación del Grupo Parlamentario Popular está compuesta por el portavoz parlamentario Alfonso Alonso, por la portavoz adjunta Beatriz Rodríguez-Salmones, el portavoz de Asuntos Exteriores, José María Beneyto, y el portavoz para la Unión Europea, Pablo Casado.
Declaración VI Reunión del Club 28
1. Es fundamental profundizar en el proceso de integración europea a través de la culminación de la Unión Bancaria. Para ello se precisa alcanzar un acuerdo general sobre el Mecanismo Único de Resolución antes de fin de año, de forma que la propuesta pueda adoptarse en la presente legislatura del Parlamento Europeo. De la misma manera debe entrar en funcionamiento la labor del Banco Central Europeo como supervisor único bancario para otoño de 2014. Este proceso en marcha debe marcar el camino para alcanzar un mayor desarrollo de las políticas comunes de la Unión en el área económica y fiscal.
2. Dentro de un proceso de fortalecimiento de los vínculos de las instituciones comunitarias con la ciudadanía hay que promover acciones concretas que permitan reforzar la legitimidad democrática de las instituciones comunitarias. La elección del presidente de la Comisión europea como candidato del grupo parlamentario más votado es un buen inicio para fortalecer este proceso de reducción de déficit democrático. Además, este proceso debe ser potenciado por una racionalización de los procedimientos y directivas comunitarias que hace crecer más la burocracia de los Estados Miembros y de las mismas instituciones de la Unión. Se debe aplicar el principio de que solo se aprobará una nueva directiva si se deroga la que está en vigor.
3. Respetar el principio de reciprocidad en el comercio internacional. Los estados Miembros deben proporcionar directrices claras a la Comisión Europea para negociar acuerdos comerciales con terceros países. Estas directrices deben ser acompañadas por procesos de refuerzo de las fronteras comerciales de la Unión y de consenso entre los Estados Miembros.
4. Ante la tragedia de inmigración ilegal hay que promover la puesta en marcha de una política común en la gestión de las fronteras exteriores y un gobierno político del espacio Schengen. Se trata de regular y gestionar los flujos migratorios de una manera conjunta. Para ello hay que reforzar los medios, y la capacidad operativa de la Agencia Europea para la Gestión de la Cooperación Operativa en las Fronteras Exteriores de los Estados miembros de la Unión (FRONTEX) y la lucha contra la trata de personas y la entrada clandestina de inmigrantes.