Debemos proclamar nuestra más firme repulsa contra la violencia de género, nuestro más absoluto desprecio por los que maltratan, física y/o psicológicamente, a su mujer y a sus hijos, desde la impunidad que les da el interior de sus domicilios.
64 Mujeres asesinadas por el hecho de ser mujeres a manos de sus parejas o exparejas; 11 menores fallecidos víctimas invisibles pero directas de la violencia machista; 24 menores huérfanos por esta brutal lacra social; y mientras tanto y enfrentado de manera fría a estas graves cifras, un dato, sólo el 2% de los españoles consideran la violencia de género como un problema grave.
Nuestra implicación como ciudadanos en la denuncia de las situaciones de maltrato que conozcamos, que escuchemos, y nuestra mano firme, segura y siempre tendida a las víctimas, mujeres e hijos, y el mensaje claro a las víctimas: ¡de la Violencia de género se puede salir!.
Es prioritario y básico promover acciones urgentes en el ámbito educativo y desde edades tempranas con el objeto de educar en valores de igualdad, de respeto, de tolerancia, de no violencia. Hay que formar a nuestros niños y niñas, a nuestros adolescentes, desde la escuela y desde la familia, para romper estereotipos y evitar las relaciones de dependencia mal entendida.
Y porque creemos que esta lucha contra la violencia machista es de todos, mujeres y hombres, hoy todos somos la voz de las mujeres y de sus hijos que callan por miedo. Por ellos, desde el GPP en el Senado, consideramos necesario y exigimos:
• Garantizar a las mujeres y a sus hijos protección efectiva y asistencia letrada obligatoria desde el primer momento de interposición de la denuncia.
• Atención específica e individualizada por equipos interdisciplinares especializados a la mujer y a sus hijos.
• La reforma de la Ley Integral a fin de reconocer a los hijos como víctimas directas de esta violencia en el mismo plano que sus madres.
• Puesta en marcha de un seguimiento estadístico centralizado sobre el impacto de la violencia en los menores.
• Inserción socio-laboral para víctimas de violencia machista.
• Mayor respuesta policial, traducida en más medios, más recursos humanos y materiales que garanticen la protección y la seguridad de las víctimas.
• Especialización judicial en violencia de género y más juzgados especializados.
• Mejorar la atención a las mujeres que sufren una doble victimización, como mujeres rurales o mujeres inmigrantes, y mujeres con discapacidad. Discapacidad que, en muchos casos, proviene de las secuelas dejadas por la violencia machista.
• Promover programas de sensibilización y concienciación dirigidos a las víctimas, a la sociedad y a nuestros jóvenes.
La portavoz de Igualdad del PP en el Senado, Carmen Dueñas, ha indicado que "con estas exigencias, que se unirán a muchas otras peticiones justas para erradicar esta lacra social, el GPP en el Senado, un año más, un día más, una hora más, un minuto más, sigue exigiendo el reproche social y penal a la violencia machista, y adquiere un compromiso firme de promover, en su capacidad de acción, una actuación integral y participativa de toda la sociedad, una actuación que sea preventiva y, especialmente, protectora con las víctimas que son quienes más nos necesitan".