"El comportamiento de Zapatero es vergonzoso, indigno e infamante"

El portavoz del Grupo Popular en el Senado, Pío García-Escudero, ha calificado de "vergonzoso" que el Gobierno español se pliegue ante un dictador que no respeta la democracia, mientras le pide exigencias a un juez democrático

García-Escudero ha asegurado que Chávez es "un parásito de la Democracia, que la ha utilizado para instalarse en el poder, y, desde él, liquidar la separación de poderes, reprimir las libertades públicas y los derechos políticos de la oposición, o colaborar con grupos terroristas como ETA y las FARC".

En este contexto, el portavoz popular ha recordado a Zapatero que hace cuatro años, ya le instó a defender los derechos de los españoles en Venezuela, "sometidos a violentos expolios, secuestros, y atropellos de sus derechos", y le recordó que, en estos días, el Gobierno de Chávez ha dejado de pagar las pensiones a 3.000 españoles, sin motivo.

Del auto de la Audiencia Nacional emitido por el juez Velasco, García-Escudero ha señalado que "certifica lo que ya se sospechaba: serios indicios que apuntan a la cooperación del Gobierno de Chávez con las FARC y ETA. Un asunto gravísimo que afecta a la Seguridad del Estado Español".

Los balbuceos de Moratinos
Ante tal cúmulo de despropósitos, Pío García-Escudero ha declarado que "no se pueden consentir los desplantes de Chávez hacia usted, hacia nuestro Poder Judicial, y hacia España". Asimismo, ha tildado de "vergonzoso" que el Gobierno, que no le pide explicaciones a Chávez, sí se las exija al juez Velasco, por el contenido de su Auto, fruto de las investigaciones de la Policía Española.

Cuba También
En su análisis de las complacientes relaciones que Zapatero mantiene con países que no respetan los derechos humanos, García-Escudero ha hecho referencia también a Cuba. El dirigente del PP hizo una referencia directa a la muerte, en huelga de hambre, en una cárcel del castrismo, de Orlando Zapata, y a cómo, pocas horas después, Zapatero, que pronunciaba un discurso en la ONU, "en la costosa "Sala de los Derechos Humanos y de la Alianza de Civilizaciones"", no hacía ni la más mínima mención al asunto, pese a estar "en el mejor momento y lugar para hacerlo".

De este modo, ha reclamado al Gobierno un cambio de actitud respecto al régimen castrista, "porque para un demócrata -dijo-, la prioridad debe de ser siempre el pueblo cubano, sus derechos y su necesidad de recuperar la libertad. Y las alabanzas continuas a los supuestos progresos del régimen, y el continuo desprecio a la disidencia, como hace Moratinos cada vez que visita la isla, no le sirven de nada ni al pueblo cubano, ni a los 230 presos políticos que hay en sus cárceles".