Celebramos que se dote de mayor transparencia y más instrumentos a la lucha contra el fraude

Según explicó, “con esta reforma se completa una reforma integral que arrancó en diciembre de 2012, con la Ley Antifraude y la reforma del Código Penal para endurecer las penas por delito fiscal, y que ha permitido obtener en un tiempo de solo tres años unos resultados históricos en la lucha contra el fraude —con una cifra récord de 12.300 millones en 2014—, en un contexto de gran morosidad, falta de liquidez y referido a ejercicios no prescritos en los que se habían reducido las bases imponibles”.

La razón por la que ha sido posible que se alcancen estos datos históricos en una época de crisis, superando con holgura los resultados obtenidos en épocas de bonanza —un total de 34.785 millones de euros entre 2012 y 2014, lo que supone un 21,5% más que los tres últimos años del gobierno socialista— obedece a que “la política tributaria del Gobierno es más eficaz que las anteriores, pues desde que arrancó la legislatura se ha dotado a la Administración Tributaria de los medios suficientes, en especial de los instrumentos jurídicos, para luchar contra este fenómeno”.

Asían sintetizó los grandes pilares de la reforma de la Ley General Tributaria, que recoge un paquete de medidas con una doble finalidad: potenciar la lucha contra el fraude e incrementar la seguridad jurídica de las normas tributarias.

Para ello, se impulsará la publicación de la lista de morosos con deudas y sanciones tributarias pendientes superior a un millón de euros, no incluyendo las cantidades aplazadas o suspendidas. A su vez, éstos contarán con un trámite de alegaciones previo a la publicación en dicha lista donde podrán aducir errores materiales pero no temas de fondo.

En segundo lugar, detalló Asían, se acuerda iniciar los trámites para una Ley Orgánica a fin de que pueda darse publicidad al listado de defraudadores condenados con sentencia firme por delitos contra la Hacienda Pública, de acuerdo con el informe del Consejo de Estado. La publicación de las sentencias no será completa, garantizando así el máximo respeto al honor, la intimidad y la protección de datos de carácter personal.

De igual modo, se incluye una nueva regulación para el conflicto en la aplicación de la norma que permitirá luchar mejor contra la planificación internacional agresiva, lo que supone un nuevo instrumento de mejora que se pone al servicio de la Administración Tributaria en su batalla contra esta lacra.

Asían destacó, finalmente, la ampliación de los plazos de prescripción así como las medidas que van a permitir incrementar la seguridad jurídica, especialmente promoviendo la utilización de medios electrónicos y mejorando la regulación de los procedimientos.