Casado tiende la mano a Sánchez y le advierte: “O se levanta de la mesa de negociación o las consecuencias serán letales para España”

Denuncia que Sánchez esté “blanqueando” a Puigdemont y que, en lugar de traerlo a España, “le deje hacer lo que le da la gana”, al tiempo que lamenta que el presidente del Gobierno no se haya quejado a las autoridades francesas por el acto de Perpiñán.

Contrapone la lealtad del PP con el Gobierno en la gestión del coronavirus, frente a lo que hizo Sánchez con el ébola responsabilizando a Rajoy de esa crisis sanitaria.

Se queja de que, en el caso del vertedero de Zaldibar con dos personas desaparecidas, no haya sucedido nada porque la izquierda y los nacionalistas tienen patente de corso y se pregunta qué hubiera pasado si esto le hubiera ocurrido al PP.

Critica que Sánchez haya ofrecido al PNV la gestión de la Seguridad Social, rompiendo así la caja única, lo que hará que haya “pensionistas de primera y de segunda”.

Subraya que Sánchez pretende perpetuarse en el poder aprobando los PGE con los que quieren romper España y reitera la mano tendida del PP para sacar adelante las cuentas si rompe la mesa de diálogo con Torra. “Tampoco es mucho pedir”, asevera.

“El problema de que salgan de permiso penitenciario es porque Sánchez lo permite”, señala Casado en alusión a Junqueras y Romeva, explica que la administración penitenciaria depende de los políticos y recuerda que la Fiscalía podría recurrir la salida.

Sobre la renovación de los órganos judiciales: “¿Cómo vamos a hacerlo si Sánchez ha nombrado a Delgado fiscal general del Estado y amenaza con una reforma del Código Penal” para conceder el tercer grado a Junqueras?, se pregunta.

Subraya que las amenazas del vicepresidente Iglesias a los medios de comunicación “deberían analizarse” y que “se han cruzado todas las líneas rojas”.

Sostiene que el “PSOE miente mucho” y que en nuestro país “la mentira no tiene un coste electoral”. “La izquierda tiene un mecanismo de propaganda y superioridad moral”.

Afirma que el PP “es un partido nacional y no federal”, pero que “está muy pegado al territorio y muy cercano a los problemas reales de los ciudadanos”.

Lamenta que el PP haya tenido que recurrir en el caso Ábalos a un juzgado de guardia para que el Gobierno no destruya las pruebas, tras reunirse con la vicepresidenta de Venezuela, acusada de torturas.

Alerta de que el “cóctel explosivo” del Gobierno -aumento del paro y de la deuda, y subida de impuestos- nos puede llevar a otra crisis.