Casado: “Para crear más España hay que creer en España. Nosotros creemos. En España y en la Libertad”

El líder del PP considera que la sociedad española tiene muy claro “el quien es quien del triste Pacto de los Indultos”. “Y sabe muy bien que nadie salvo quienes los promueven y los aplauden son cómplices de ese acto, profundamente inmoral y trágicamente equivocado”. 

“No hay más cómplices que ellos en este acto que no clausura, sino que inicia un nuevo proceso de mutación constitucional para hurtar a los españoles su soberanía”, subraya.

Considera que los indultos añaden “más tensión a una sociedad que lo último que necesita de su Gobierno es que debilite las instituciones, que premien a quienes atentan contra ellas, que entregue la agenda nacional a quienes pretenden romper Cataluña, España y Europa” “Y que lo haga por puro interés personal, por una ambición de poder patológica”, recalca.

“Nada permite conectar esos indultos con el menor rastro de servicio al interés general, y su responsabilidad corresponde en exclusiva a Pedro Sánchez y a su Gobierno, como establece nuestro sistema político, una Monarquía parlamentaria ejercida de forma impecable por Su Majestad el Rey Felipe VI, como Jefe del Estado”.

“No podemos seguir así, no queremos seguir así”, apunta Casado sobre las divisiones generadas en España por el Gobierno “que son mucho más de la mala política que de la sociedad”. “España debe volver a ser un motor y no un depósito de solidaridad”.

Avisa de que los fondos europeos “no pueden ser el dinero con que Sánchez se pague otra ronda de desgobierno, división y parálisis”, recuerda el trabajo que ha hecho el PP para que lleguen las ayudas de Bruselas y apunta que “ahora lograremos que lleguen a los españoles

“El Gobierno tiene que hacer llegar los fondos a la sociedad ya. Sin clientelismos ni mermas de eficacia por culpa de servidumbres ideológicas o dependencias parlamentarias. Nosotros estaremos vigilantes y nos aseguraremos de que sea así”

El presidente del PP presenta una convención itinerante, que se clausurará en Valencia, bajo el lema “Creemos en España. Creemos un futuro en libertad”, que se celebrará en seis ciudades durante siete días, con 25 mesas temáticas y en la que participarán 450 representantes de la sociedad civil. “Esta convención es el PP con todos y en traje de faena. Así la queremos. Es la oportunidad para un reencuentro nacional”.

Apuesta por un partido que se ensanche cada día más “desde nuestra izquierda y desde nuestra derecha, alrededor de un proyecto razonable y centrado en lo que España necesita”.

Anima a ser “un partido que esté, que diga y que haga. Que esté donde debe, que diga lo que piensa y que haga lo que dice” e insta a debatir los “problemas reales de los españoles” con los que el PP no hará “políticaficción sino verdadera política”.

Afirma que “esta convención debe tener mucho de rebelión cívica” y ser “una rebelión democrática y serena que se plante frente al intervencionismo sin sentido, a la asfixia de la sociedad, a la ruptura de la ley y de los lazos nacionales que se nos quieren imponer”

Declara que el PP quiere abrirse más a la sociedad española, escucharla, hablar de ella, aprender de ella, explicarle sus ideas, recibir propuestas y ofrecer las suyas. “Debemos abrir nuestras sedes de par en par, llevar el partido a pie de calle, a pie de obra y de negocio. Seamos un partido hecho de abajo arriba, bien anclado en la realidad, volcado en los problemas reales de los españoles”.

Denuncia que “en España se ha iniciado el tiempo del malestar” pero subraya que el PP rechaza “el voto del rechazo” porque desea “el de la esperanza, el voto del reformismo, el voto de los que quieren volver a construir y dejar atrás este tiempo sin horizonte”.

“No vamos a dedicarnos a imaginar ningún futuro lejano mientras millones de españoles sienten el presente moverse bajo sus pies. Creemos en los españoles, creemos un futuro mejor para todos. No sólo el de sus vidas, sino el de la vida política, económica, social y cultural de su país”

“Nuestra propuesta es simple: de nuevo concordia, de nuevo reforma, de nuevo libertad. El reformismo es el sistema operativo de las democracias modernas; la libertad, su verdadero poder; la concordia, lo que permite no vivir como dramas los desacuerdos”, explica

Destaca que “no vamos a instalarnos en una moral de resistencia; nosotros actuamos para ganar. Y se gana sudando y sumando cada voto hasta que sean millones más.

Incide en que tiene que terminar “la España de puños cerrados, en la que algunos nos quieren para siempre. Hay que cerrar fracturas y abrir negocios”.

Convoca a todos “a trabajar juntos” y advierte de que “ni hay atajos al futuro ni el presente tiene puertas de emergencia para escapar de los errores que se cometen en él. Al futuro se llega día a día, paso a paso. Trabajando bien cada día, y avanzando en la buena dirección con cada paso”

Insta a que la política española “baje ya de la nube de tormenta en la que algunos la quieren instalada para siempre” y que aterrice “en la cruda realidad que viven las familias y las empresas para ayudarlas aportando soluciones y no creándoles más problemas”.

“Ante la crisis, hay que acelerar la economía y hay que poner el cinturón de seguridad a la sociedad española con un modelo de bienestar sostenible y justo. Las dos cosas las sabemos hacer bien”, apunta

Avisa de que “no solo hay una amenaza de fractura territorial, que hay que abordar como merece” sino que “también hay un riesgo de fractura entre generaciones, un riesgo de fractura social.” “Por eso, además de la concordia política necesitamos también la concordia social”, señala.

Concluye que desde el PP “elegimos la unidad y las reformas, elegimos la Nación, elegimos lo de todos. Y nos ponemos manos a la obra”