Bermúdez de Castro: “La transparencia y el buen gobierno son principios que ayudan al fortalecimiento institucional y democrático”

Destaca que la Ley de Transparencia aprobada por un Gobierno del PP supuso “un gran avance e inició a una nueva etapa, un nuevo modelo de relación entre las Administraciones y los ciudadanos sobre la cultura de la transparencia y la información” 

Recuerda que antes de 2013 -año en que se aprobó esta norma- “la regla en las relaciones entre ciudadanos y Administraciones era la discreción y la opacidad; desde entonces la regla es la transparencia” 

“Antes la información era la excepción, desde entonces ha sido la norma”, subraya Bermúdez de Castro, quien lamenta que “en ocasiones esos principios no se hayan cumplido, como se ha visto en el Congreso de los Diputados” 

Remarca que “la ley recogía los principios de buen gobierno que deben marcar la actuación de todo gobernante: eficacia, responsabilidad, rigor y ejemplaridad en la gestión de los recursos públicos”. “Una ley de autoexigencia porque a más transparencia más control sobre las cuentas públicas”, afirma 

Diez años después de la entrada en vigor de la ley, considera que el balance es positivo, pero que ha llegado del momento de actualizarla y adaptarla a una sociedad que cada vez es más crítica y reclama más información y que sea más clara, completa y veraz

“Los españoles reclaman que se despeje cualquier sombra o sospecha de arbitrariedad en la gestión de recursos públicos, exigen que se faciliten los mecanismos de control y rendición de cuentas y no van a aceptar que haya más dificultades o que se les trate como a un número para conseguir cita o para resolver un problema con la Administración”, asevera

 “En democracia los ciudadanos siempre tienen derecho a saber y a entender lo que pasa y los poderes públicos tenemos la obligación de dar una respuesta positiva a dicha demanda”, remarca el dirigente del PP, quien señala que “ese es el único camino para conseguir mejorar la confianza y cercanía entre representantes y representados” 

Tiende la mano a la sociedad civil para seguir trabajando para garantizar y fortalecer la independencia de las instituciones del Estado y la eficacia de la Administración, desarrollando e incidiendo en los principios de transparencia y buen gobierno 

“No es casualidad que los países que cuentan con mayores niveles en materia de transparencia y normas de buen gobierno cuenten también con unas instituciones más fuertes”, asegura 

“Profundizar en una mayor fiscalización de la actividad política y la gestión de recursos públicos, potenciar el gobierno abierto con el acceso a una información más amplia y detallada, y fortalecer los mecanismos de participación ciudadana contribuyen a la regeneración democrática, promueven la eficacia del Estado y favorecen el prestigio de una nación”, concluye