Señora Montero, ¿usted necesita protección? Yo como mujer no la necesito porque soy libre e igual. Sin ningún complejo. El mío no es un feminismo fijo discontinuo, de pega y fake como el suyo.
Como mujer no necesito tutores ni protectores. Por eso, creo que Dina tampoco los necesitaba. No necesitaba a nadie que ejerciera sobre ella un derecho de usufructo sobre su privacidad.
Sencillamente es inaceptable y vergonzoso que su Ministerio no condene este hecho.
Señora Montero: ¿usted reconoce un machista? ¿Sabe lo que es machismo? ¿Qué haría si se comportaran con usted igual que se comportaron con la señora Dina? Creo que lo repudiaría.
Le digo una cosa, señora Montero, la única pareja estable y para siempre es la conciencia de cada uno. Es la única con la que dormimos todos los días de nuestra vida.
Esta pregunta le brinda una buena oportunidad para elegir: entre sus principios o entre sus incoherencias. Le aconsejo que opte por sus principios, porque solo así se liberará de una carga para siempre.
El autor de estos hechos no es un burgués de los años 60, ni un machista anónimo. Hablamos del vicepresidente segundo del Gobierno de España. El de los azotes. El líder de un partido al que una de sus más destacadas dirigentes, Carolina Bescansa, acusó de machismo. Su partido.
Hoy tiene una oportunidad, porque detrás de Dina están todas las mujeres españolas. Está en sus manos decidir si se manifiesta con ellas en contra de todos los todos los tipos de violencia machista o elige la incoherencia. Pero detrás de la incoherencia, hay miles de mujeres que lo están pasando muy mal y que no van a confiar en usted. Si alguna vez lo han hecho.
Este es el momento de la verdad. Es el momento del coraje. Es el momento del ¡Basta ya!. No deje que nadie decida por usted, porque en ese momento se estará convirtiendo usted en víctima.
Titulares de Belén Hoyo en la Sesión de Control al Gobierno
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