Álvarez de Toledo: “La reapertura del Parlamento es una victoria de la presión democrática del PP”

Los demócratas tenemos motivos para celebrar. Nuestro empeño democrático ha logrado que se reabra el Congreso en defensa de los derechos democráticos de todos los ciudadanos.

Dije hace un mes ‘el Congreso no se cierra en estado de guerra’. Y ese es el grito de batalla que hemos defendido estas semanas.

Hemos conseguido volver a controlar al Gobierno, que las Comisiones vuelvan a reunirse, que empiecen a contestar nuestras preguntas, que se enmienden los Decretos, que se califiquen todas las iniciativas y se organicen Ruedas de Prensa como la de hoy.

Esto ya no era un estado de alarma, era un estado de cuarentena democrática.

La reconstrucción de cualquier gran acuerdo español en los próximos tiempos tiene venir sobre dos ejes: la Constitución y el equilibrio entre lo público y lo privado.

Sánchez gobierna con un partido que es la antítesis de los pactos de La Moncloa, que trabaja activamente para la erosión del brillante sistema constitucional del año 78.

Me siento hoy reivindicada. Mi Grupo Parlamentario y todos los demócratas que queríamos la apertura del Parlamento tenemos motivos para celebrar. Hoy ha sido
una victoria de la presión democrática del Partido Popular en defensa de los derechos democráticos de todos.

La Presidencia del Congreso ha rectificado sobre el cierre del Congreso de la misma forma que La Moncloa tuvo que rectificar respecto a la censura de los medios de comunicación, respecto a esas ruedas de prensa prefabricadas, enlatadas.

Presentamos esta mañana, y ayer mismo lo di a conocer en la reunión conjunta de diputados, senadores y europarlamentarios, un Plan para la reapertura inmediata del Parlamento. Y esa presión, conjuntamente con la presión sobre todo ejercida por Pablo Casado sobre el Gobierno para que se abriera esta Cámara, ha surtido efecto.

Partíamos de dos premisas básicas. Que los diputados somos parte del servicio esencial que tiene que estar en funcionamiento permanentemente para que la Democracia esté en funcionamiento. Y que los diputados no somos de mejor condición que tantas personas que están luchando durísimamente en primera línea contra el Coronavirus: médicos, enfermeras, cajeras en supermercados, policías y guardias civiles. Todos los que heroicamente están luchando en primera línea tienen que tener por parte de sus representantes el mismo compromiso y la misma responsabilidad. Eso significaba mantener el Congreso abierto, el Parlamento funcionando y nosotros activamente estar también en nuestro lugar de trabajo.