Álvarez de Toledo: "Por fin se ha visto la cara oculta del independentismo y el nacionalismo. A la revolución ya solo le queda la rabia"
En Barcelona
Titulares de sus declaraciones ante los medios de comunicación:
Estamos viendo las cenizas y escombros de un Proceso fracasado. El aquelarre adolescente de estos días es el paisaje que muestra los estertores de ese fracaso. Fracasaron el golpe, el referéndum del 1 de octubre y la huelga golpista de ayer. Incluso las cifras de la Guardia Urbana, que hablan de 500.000 personas, son menores que las de cualquier convocatoria anterior del independentismo.
El eje principal del fracasado Proceso ha sido un profundo odio a Cataluña. Ha buscado incendiar la ciudad, y levantar barricadas. Solo quien odia a Cataluña es capaz de convertir a sus vecinos en rehenes de su ideología reaccionaria con fuego y destrozos.
A la revolución ya solo le queda la rabia. Enfrente hay demócratas, constitucionalistas, ciudadanos de distintos partidos e ideologías que dicen ‘no queremos vivir en una Cataluña dividida, enfrentada e incendiada’.
Por fin se ha visto la cara oculta del independentismo y el nacionalismo. Veíamos la punta del iceberg, pero bajo el agua se ocultaba la profunda violencia estructural que acompaña al separatismo y al nacionalismo.
Quiero manifestar mi absoluta gratitud, admiración y apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que están actuando para defender los derechos y las libertades de todos los catalanes, y de todos los españoles.
Estos días van a ser un punto de inflexión. Vamos a construir una nueva Cataluña tolerante, democrática, pacífica, respetuosa, que ama la libertad y la igualdad. Esa Cataluña existe y está representada por personas que durante muchos años se han sentido desamparadas, solas, abandonadas por el Estado y por sus representantes políticos. Tienen todo el derecho a ser defendidas y nunca más se sentirán solas.
Vamos a construir una nueva Cataluña adoquín sobre adoquín, piedra a piedra, y lo vamos a hacer con convicción, coraje y capacidad de desafío. Abriremos una nueva etapa de fortaleza constitucional, de despliegue del Estado y de defensa de la libertad y la igualdad en todos los rincones de Cataluña. Lo haremos con un discurso de amor a Cataluña, de defensa de los catalanes que quieren la democracia. Lo haremos con el discurso de la libertad.
Después de 40 años de abdicación y sobre las cenizas del Proceso vamos a levantar una Cataluña tolerante y profundamente democrática, donde se imponga la ley que es igual para todos.