Álvarez de Toledo avisa que el fiscal general del Estado tiene un porvenir penal sombrío y pide al Constitucional que no se preste a ser cómplice de la degradación

La portavoz adjunta del GPP, Cayetana Álvarez de Toledo, asegura que el fiscal general del Estado, como un delincuente confeso, destruyó las pruebas que habrían permitido al Tribunal Supremo descubrir la verdad. “Es un comisario político disfrazado de fiscal, pero tiene los días contados”, afirma 

Pide a los magistrados del Tribunal Constitucional que no se presten a ser cómplices de la degradación del Gobierno. “No son ustedes un tribunal de casación y mucho menos un salvoconducto para la impunidad de nadie”, señala 

Sostiene que Álvaro García Ortiz ha invadido el derecho fundamental de un particular, tal y como lo acredita el Reglamento Europeo y la Guía Básica del ministerio Fiscal, ya que “jamás debió manejar datos del novio de Ayuso en su cuenta personal de Gmail, porque es ilegal” 

Acusa al ministro de Justicia, Félix Bolaños, de difamar al Supremo y pregunta si él también considera, como defiende el fiscal general, que este Tribunal invade derechos fundamentales, actúa con predeterminación y no busca la verdad 

Defiende que los jueces son “el primer dique democrático, el verdadero escudo del pueblo frente al poder” y avisa al Ejecutivo de que los populares van a impedir la criminalización de la justicia 

Ante la falta de respuestas de Bolaños, insta a Francina Armengol a garantizar el control democrático al Gobierno y le exige que, “si prefiere ejercer como ministra de Sánchez, renuncie a su cargo como presidenta del Congreso"